Finalmente fue Norma Lucía Piña Hernández la elegida para presidir la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). Un hecho histórico por ser la primera mujer en llegar a ese cargo y la mejor opción de entre las otras candidatas a presidir el máximo tribunal de la nación.
Consciente de su papel, en su discurso de toma de protesta hizo mención a su condición de mujer al frente de uno de los tres poderes del Estado mexicano. “Represento también a las mujeres; a nuestro nombre les agradezco la congruencia a mis compañeras y compañeros; reconozco la importantísima determinación de la mayoría de este tribunal pleno de romper lo que parecía un inaccesible techo de cristal. Me siento acompañada, respaldada, acuerpada por todas ellas, por todas nosotras. Me siento muy fuerte porque sé que estamos todas aquí: nos colocamos por primera vez al centro de la herradura de este tribunal pleno demostrando y demostrándonos que sí podemos”, expuso.
Reconoció que el proceso para llegar no fue fácil, puesto que no debemos olvidar que hasta antes de su nombramiento la más fuerte aspirante era Yasmín Esquivel, quien de no ser porque exhibieron el plagio de su tesis de licenciatura muy probablemente hoy sería la presidenta de la SCJN.
Tampoco debemos olvidar el penoso papel que en todo el proceso jugaron la fiscal de la CDMX y su jefa directa, quienes en un intento por limpiarle la cara a la indefendible Yasmín la exoneraron torpemente del delito de plagio, luego de que la implicada presentó presuntas pruebas de su “inocencia” que al cabo de unas horas se le cayeron.
Porque resulta que el abogado Édgar Báez, quien supuestamente había firmado una confesión notariada en la que confesaba que él había plagiado la tesis de Yasmín Esquivel, salió a decir que él nunca firmó ni confesó tal cosa. ¡Plop!
Poquitero
Quien sí firmó que iba a aportar las pruebas para esclarecer la maraña de corrupción en Pemex durante el sexenio anterior fue Emilio Lozoya, pero al cabo de más de dos años no ha aportado nada.
En cambio, ha salido a ofrecer 3.4 millones de dólares que se robó tras la compra a sobreprecio de la planta Agronitrogenados, pero el presidente ya le contestó que es “muy poquito” lo que ofrece para reparar el daño, pues tan solo el dueño de Altos Hornos de México, Alonso Ancira, ya ha devuelto 100 millones de dólares.
Estilo mata carita
Para terminar, solo mencionar el calvario del personal médico del ISSSTE, que convocó a protestas que pudieran derivar en un paro luego de que se les impuso checar su horario de entrada y salida a partir del 1 de enero de 2023. Los médicos se quejan de que durante los meses más duros de la pandemia fueron hasta catalogados como héroes y ahora son meros empleados a los que les imponen políticas laborales sin consultarlos.