Entraron en vigor ya los nuevos lineamientos de prevención para el Covid-19 y lo más destacable es que deja de ser obligatorio lo que en el discurso nunca fue útil.
Porque fue el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, quien se cansó de repetir desde Palacio Nacional que el cubrebocas no era de uso obligatorio, puesto que la ciencia ha demostrado que “solo sirve para lo que sirve y no sirve para lo que no sirve”.
Sin embargo, fue su dependencia la que dictó las directrices para que al menos en la aviación se prohibiera el acceso a aeropuertos y aviones sin el uso de estas mascarillas.
¿Acaso alguien ya se olvidó de que el escenario más crítico previsto por López-Gatell era de 60 mil muertos? La cuenta ya va en 500 mil decesos: él se ha convertido en un ejemplo trágico de alguien que jugó al político y le costó al país más de medio millón de fallecidos.
Nosotros lo dijimos: no le creemos. Y qué razón teníamos. Aunque hay que reconocerle su congruencia y consistencia en decir cualquier cantidad de tonterías cada que abría la boca.
Hasta el último momento sus declaraciones son las de un ser humano impresentable. Baste recordar que cuando el mundo adoptó el uso de los cubrebocas como medida para aminorar los contagios, este señor dijo que no servían para nada. ¡Ay, López- Gatell, cómo puedes dormir con tantos muertos sobre tu espalda!
Encuentros cercanos
A través de un mensaje que circula por WhatsApp entre trabajadores del Banco del Bienestar se señala a su director, Víctor Manuel Lamoyi Bocanegra, y a algunos de sus colaboradores más cercanos de sostener relaciones sexuales “con la nómina”.
“Pues cómo no van a estar tan mal las cosas en el Banco del Congal, si lo más importante son los asuntos pasionales”, se lee en el texto.
Los trabajadores, quienes piden el anonimato, me buscaron para volver a denunciar que pese a que en julio el gobierno federal autorizó un aumento salarial de 7% para todos los empleados ellos no han visto ni un solo peso.
A ello se suma que durante 2019 y 2020 la ayuda de vales que reciben en fin de año se autorizó el mero 31 de diciembre por la tarde; y eso gracias a que en todas las sucursales (mil en todo el país) amenazaron con parar.
En cuatro años que tiene de existir como Banco del Bienestar van tres directores que no dan una: primero Rabin Salazar; después Diana Álvarez Maury; y actualmente Lamoyi Bocanegra. Pero aunque existen rumores de que también podría salir, a estas alturas nada garantiza que con un nuevo mando las cosas cambien.
Estilo mata carita
Para terminar les cuento que Martín Mejía Briones, exdirector general de Obras en la alcaldía Miguel Hidalgo, responderá por haber pagado obras del Mercado Escandón sin que estuvieran ejecutadas. La autoridad judicial de la CDMX emitió una pena de tres años seis meses de prisión y el pago de casi 40 millones de pesos por la reparación del daño. Una de cal por las que van de arena.