Nos educan para ser productores y consumidores, no para ser hombres libres.
José Luis Sampedro (1917-2013)
A nivel mundial la educación de las futuras generaciones está en crisis. Por un lado, el exceso de jóvenes con maestrías y doctorados no encuentra empleo y están sumidos en la frustración, como ocurre en Corea del Sur; por otro, hay falta de mano de obra calificada en países de América Latina, lo que genera enormes ejércitos de trabajadores con pocas posibilidades de desarrollo personal y social.
A las escuelas acuden millones de niños para formarse para un futuro mejor. Ahí están pobres y ricos, de cualquier origen. Ahí se forman los que dirigirán el futuro de las naciones y quienes generarán el bienestar de los seres humanos, donde se encuentren.
Por ello muchas naciones ponen especial empeño en la educación de los niños y jóvenes.
Sin embargo, los sistemas educativos se agotan. A los jóvenes que estudian el último año de la carrera de Ingeniería, por ejemplo, ya no les sirve lo que aprendieron en el primer año. No les enseñan principios y valores de convivencia humana, como la libertad, la honestidad, así como la sana convivencia.
Es un problema mundial. No avanzamos para mejorar una sociedad, sino simplemente para sobrevivir. Pocos son los que actúan por propia iniciativa para convertirse en líderes, transformadores y emprendedores. Eso no se les enseña en las aulas.
Platico todo esto, estimado lector, luego de revisar las estadísticas de desarrollo de los niños y jóvenes en el planeta.
Los diez países más avanzados en el alcance educativo, de acuerdo con la evaluación de trabajadores entre 25 y 34 años con educación terminada, son Corea del Sur, con 69% de su población; Canadá, 67%; Japón, 65%; Irlanda, 63%; Rusia, 62%; Luxemburgo, 60%; Lituania, 58%; Reino Unido, 57%; Holanda, 56%; y Noruega con 56 por ciento.
Contrario a lo que muchos piensan, Suiza y Estados Unidos, ambos con 51%, no aparecen entre los primeros diez; Francia y España, con 50%; Dinamarca, 49%; Israel, 46 por ciento.
En América Latina, Chile es líder con 40% y le sigue Colombia con 34%; Costa Rica, 31%; y México con 27 por ciento.
Nuestro país está unos cuantos puntos arriba de Brasil, que tiene 23%; India, 20%; y Argentina, con 19%. En los casos de China e Indonesia, que tienen 27% (igual que México), solo las élites educativas (los mejores promedios) tienen acceso a enseñanza de gran nivel. Todos ellos son los más bajos de la escala.
Si revisamos los casos de éxito como nación, así como las satisfacciones individuales en un marco de libertad, encontramos que la base es la educación primaria, sin tendencias ideológicas.
Las naciones felizmente exitosas tienen una marcada preferencia por darle al individuo las bases de socialización y búsqueda de la prosperidad personal y, por ende, de la sociedad y país.
Franquicia
No es cosa menor: 82% de los legisladores federales, 93% de los locales (de los 31 Congresos que se renuevan este año) y 68% de los presidentes municipales buscan reelegirse en el proceso electoral del 2 de junio. Son números fríos, de quienes creen que merecen repetir en las chambas que tienen ahora. Muchos, pero muchísimos, tienen la cara dura y se apuntan para que sus partidos o cualquier otra “institución” les preste la franquicia para participar. La verdad de las cosas, ni 1% de ellos merece la confianza que les da la ciudadanía. Pero la democracia es así. En las boletas electorales no estarán los mejores, pero eso no importa. Lo que importa es el poder y el dinero.
Dinero Grupo Accor, que lidera Mauro Rial, sumará a su portafolio, en el primer trimestre del año, tres resorts premium de Marival Group, de Alfonso Rizzuto, ubicados en la Costa del Pacifico mexicano.
Responsabilidad Social y Gobernanza Volkswagen de México, bajo el liderazgo de Carlos Henry, presentó la conferencia Misión ambiental de Volkswagen de México, destacando su compromiso con la sostenibilidad y la responsabilidad social empresarial a través de la Estrategia Ambiental de la Producción al Año 2030 Go to Zero Impact Factory.