En contra de la voluntad de los vecinos de Zacatenco, el Instituto Nacional de Vivienda (INVI) se propone construir 30 departamentos en una zona residencial de la alcaldía Gustavo A. Madero, que traerían más tráfico a la zona, escasez de agua, que de por sí no tienen, y una saturación de personas que ocasionaría muchos problemas a los residentes del área, quienes se han manifestado en varias ocasiones para frenar esa obra irregular.
“El predio en que intentan construir se encuentra ubicado sobre la calle Tierra Colorada en Zacatenco. Buscan utilizar la Norma 26, que debido al abuso que se hizo de ella en el pasado se encuentra detenida; la están retomando sin importar que se violente el uso del suelo. Y en esa zona, bastante tranquila, se desquiciaría la tranquilidad de que gozan los vecinos del lugar”, denuncia Diego Garrido López, del grupo Diputados en Acción.
Ciertamente no es la primera vez que los vecinos salen a la calle a protestar por esta obra irregular, sin que las autoridades los tomen en cuenta: ni los ven ni los oyen, diría el clásico. Pero insisten en demandar que se cancele ese proyecto en beneficio de los habitantes del lugar.
El INVI desde hace tiempo parece cometer irregularidades en las obras y cabe recordar que estas las financia a petición de una organización. ¿Cuál es el interés en ese predio? ¿A quién pretende beneficiar?
“Los vecinos aseveran que no permitirán la obra porque es un claro desafío a la voluntad de la gente, que no quiere obras de impacto alrededor de sus casas, pues terminarían con su tranquilidad y propiciarían una serie de problemas que las autoridades no toman en cuenta o no los quieren ver porque tiene algún compromiso”, dice Garrido, quien acompañó a los vecinos en su manifestación.
Esas declaraciones son una manifestación del descontento que existe, sin que nadie voltee a verlos o trate de escuchar las razones por las cuales hay oposición a la obra. Y el INVI tiene la obligación de conocer la intención que hay en construir esos 30 departamentos, porque la Norma 26 en el pasado fue violada por todos los constructores y desarrolladores, que en vez de construir vivienda de interés social terminaban con departamentos de lujo, fuera del alcance de las familias a las que supuestamente debían beneficiar. Se acuerdan, ¿verdad?
El bolso de Laura…
Ahora déjeme contarle que esta II Legislatura del Congreso de la Ciudad de México pasará a la historia como una de las más perezosas, puesto que sus integrantes en su mayoría no tienen idea lo que es legislar, porque es más fácil levantar la mano cuando se les instruye. Y eso muy pocas veces, porque desde que inició este último periodo ordinario de gestión han suspendido cinco veces consecutivas las sesiones. Y para concluir solo faltan escasas diez, si es que logran asistir por lo menos la mitad más uno. Ah, pero están esperando su pago de marcha de 500 mil pesos por no asistir. Ellos y ellas están en campaña y no les preocupa la sesión. Lo inconcebible es que muchos pretenden reelegirse, pero se sabe que no todos lo lograrán. ¿Por qué será?... La Comisión de Gestión Integral del Agua del Congreso local convocó a un foro en busca de alternativas que permitan salir adelante de esta crisis: no queda más que sumar esfuerzos. De acuerdo a Sacmex el origen de la crisis está en los bajos niveles del Sistema Cutzamala, pues el suministro se redujo en los últimos cuatro años en 20%. Y según expertos se debe reforzar el cuidado de la cultura del agua; atacar el problema de las fugas del líquido, que ocasiona una pérdida de 40%; y, claro, modernizar la infraestructura, que en su mayoría está caduca. O sea que hay que invertir, y en serio, aunque sea inversión que no se ve, que no luce. No hay de otra, porque el destino nos alcanzó en tiempo de espera. ¿O no?...