PAULATINA REAPERTURA DE LAS ZONAS ARQUEOLÓGICAS

Durante 2019 las zonas arqueológicas recibieron más de 14 millones de visitantes

Hector González
Cultura
Zona Arqueológica de Teotihuacan. Foto Mauricio Marat. INAH (3).jpg
INAH

Las zonas arqueológicas poco a poco se suman a la reactivación del país: según la Secretaría de Turismo los visitantes a este tipo de espacios durante 2019 fueron 14 millones 524 mil, cifra que coloca a nuestro país entre los principales diez destinos a escala mundial.

Una de las primeras en abrir puertas fue la Zona Arqueológica de Teotihuacán. Desde ahí Alejandra Frausto Guerrero, titular de la Secretaría de Cultura, resaltó la importancia de abrir los espacios de manera paulatina. “Ahora se vive en una nueva realidad, donde hay que cuidar la salud personal y la de otros y recuperar los mayores símbolos, lo que le da sentido a haber salvado la vida: nuestras culturas, nuestra identidad y el respeto a todas las manifestaciones artísticas y culturales”.

Con la reapertura, y en paralelo a la revitalización del turismo, se espera beneficiar también a los más de siete millones de personas que según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía se dedican a la producción y venta de artesanías, rubro que de acuerdo con la Cuenta Satélite de la Cultura de México representa una contribución de 17.8% al PIB del sector de la cultura, esto es, 0.6% del PIB nacional, con una aportación de 110 mil 121 millones de pesos.

Tan solo en Teotihuacán el regreso a la actividad implica trabajo para más de 200 guías de turistas, 700 vendedores y más de tres mil artesanos.

En este sentido la funcionaria reconoció que los artesanos y artistas en medio de la contingencia por Covid-19 quedaron en vulnerabilidad y ahora pueden reiniciar actividades con la apertura de Teotihuacán. “Es importante que cultura y turismo se unan y se recuperen de manera segura y consciente. Ya aprendimos que nos tenemos que cuidar. Claro que no es cómodo hablar con un cubrebocas; claro que no es cómodo tener que estar pendiente todo el tiempo; pero ya lo aprendimos y lo primero es cuidarnos y cuidar al otro”, dijo.

Diego Prieto Hernández, titular del Instituto Nacional de Antropología e Historia, confirma que la reapertura de las 194 zonas arqueológicas y 165 museos que están a cargo del INAH será paulatina, siempre respetando las medidas para la protección de la salud que las autoridades determinen para el disfrute, aprecio y la admiración de los mexicanos y visitantes que se interesan en el patrimonio histórico, antropológico y paleontológico de México.

Extremar precauciones

Los funcionarios ponderan que la vuelta a la nueva normalidad será gradual. A la par de Teotihuacán, sitios de Campeche, Guanajuato, Morelos y la Ciudad de México vuelven a recibir al público bajo estrictos protocolos sanitarios.

En el caso del espacio sede de las pirámides del Sol y la Luna por ahora solamente es posible visitar algunas áreas abiertas, como la Calzada de los Muertos, plazas y explanadas. El ascenso a las estructuras está cerrado, así como los complejos de Quetzalpapálotl, Río San Juan y los Palacios, y los museos de la Pintura Teotihuacana y de la Cultura Teotihuacana.

La zona se mantiene abierta de lunes a domingo de 9:00 a 15:00 horas y se permite el acceso a un máximo de tres mil personas por día. El aforo se distribuye de acuerdo a las cinco puertas de acceso y estas cierran al momento que se terminan los boletos asignados.

Otros de los sitios que están ya en activo son Uxmal, Xcambó, Mayapán, Izamal y Ek Balam, en Yucatán.

En tanto, Chichén Itzá y Dzibilchaltún abrirán puertas el martes 22 de septiembre. En el caso del primero, considerado el segundo más visitado a nivel nacional después de Teotihuacán y con una afluencia anual promedio de un millón 200 mil asistentes, el aforo permitido será de tres mil visitantes diarios.

En todas las zonas arqueológicas los horarios y días de visita se modificaron provisionalmente. A su vez los visitantes deberán portar cubrebocas en todo momento, además de mantener la sana distancia establecida de 1.5 metros, con la excepción de los niños, quienes deben estar acompañados de un adulto.

Al llegar a las zonas arqueológicas se tomará la temperatura a los visitantes y se les otorgará gel antibacterial en el filtro sanitario que habrá en cada acceso. Solo se permitirá la entrada de grupos con un máximo de diez personas, incluidos los grupos guiados por operadores de servicios turísticos; también se prohíbe el ingreso con bebidas alcohólicas y a personas en estado de ebriedad.

Al término de la jornada se realizará la desinfección de los espacios laborales, sanitarios y áreas comerciales. La venta de boletos a las zonas arqueológicas es únicamente en taquilla. Tanto en los sitios arqueológicos como en los recintos que componen la Red de Museos del INAH se aplicarán de manera normal las tarifas y exenciones de pago.