El presidente Felipe Calderón termina su administración esta semana y aunque su estrategia de seguridad y combate al crimen organizado ha tenido reconocidos logros, la guerra contra la delincuencia se ha estancado al final del sexenio, publicó The Washington Post.
La estrategia de seguridad ha provocado al menos 60,000 muertes y si bien se capturó a más de 24 de los capos más buscados, estas vacantes ya fueron ocupados.
Aunque al final del sexenio, la tasa de homicidios disminuyó ligeramente y el nivel de aceptación del presidente Calderón se mantienen en el mismo nivel que cuando inició su administración, la concentración de su política en el combate al narco provocó que los logros en otras áreas parecieran menos.
Por su parte, el presidente electo de México, Enrique Peña Nieto, ha manifestado que continuará con la lucha contra el crimen organizado pero de otra manera, enfocándose más en la disminución de la tasa de homicidios.
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Redacción Vértigo Político