Cada vez más mexicanos apuestan por la motocicleta como un medio de transporte económico y eficiente para solucionar el problema de la movilidad en nuestro país: de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en México hay poco más de un millón y medio de motocicletas, por lo que ese parque vehicular aumentó 500% en 14 años.
Jalisco, según datos del INEGI, es la entidad de la República Mexicana con mayor número de motocicletas transitando por sus calles, seguido del Estado de México, Quintana Roo, Yucatán, Michoacán, Distrito Federal, Torreón, Durango, Tabasco y Veracruz.
Ante el incremento de este sector, muchas personas observan una clara oportunidad de negocio para montar talleres especializados, ofrecer servicio de mantenimiento y distribución de refacciones.
¿Quiénes se pueden aventurar a aperturar su propio negocio? Sobre todo aquellos que hayan trabajado previamente en la reparación de motocicletas o estén cursando la carrera de mecánico en esta rama.
Lo primero a considerar es en qué área te quieres especializar: pintura, accesorios o reparaciones. Una vez que te des a conocer podrás ofrecer servicios adicionales a tu base de clientes.
Soluciones sobre ruedas es el primer taller especializado en reparar motocicletas en el lugar donde se encuentren y, si es necesario, trasladarlas a su taller con un compromiso de fecha de entrega. Este nuevo concepto de taller sobre ruedas da la posibilidad a los usuarios de reparar cualquier avería de un modo rápido, cómodo y económico, dándole una solución inmediata al cliente.
Al respecto Gerardo Flores, gerente de operaciones de Soluciones sobre ruedas, comenta a Vértigo cómo surge la idea de montar estos talleres móviles: “Cada vez más empresas están optando por este medio de transporte para realizar sus actividades, así que decidimos cubrir las necesidades de estos clientes. Además, pensamos que la motocicleta es el vehículo del futuro. Contamos con dos camionetas equipadas con un generador de luz que sirve también como soldadora, un compresor, herramientas y refacciones. Cada vehículo es atendido por dos técnicos que ofrecen mantenimiento a cuatro mil 500 motocicletas en la zona metropolitana y en cuatro entidades: Guerrero (Chilpancingo, Chilapa, Teloloapan, Taxco e Iguala), Morelos (Cuernavaca, Cuautla y Jojutla), Querétaro (San Juan del Río) y Distrito Federal”.
Gerardo resalta que la mayor parte de las motocicletas que reparan son de cilindrada entre 50 y 250 centímetros cúbicos, que ocupan 70% del mercado en nuestro país debido a sus precios reducidos, planes accesibles de financiamiento y ahorro de gasolina, ya que de acuerdo con expertos estas cilindradas en promedio rinden de 100 a 150 kilómetros por galón.
Con respecto a cuántas motocicletas dan mantenimiento, el especialista en vehículos de dos ruedas dice que atienden en promedio 400 unidades al mes y espera que con el crecimiento de este parque vehicular siga en aumento su número de clientes.
“La innovación es una de las competencias estratégicas de Soluciones sobre ruedas, la gerencia de administración de flotillas equipa vehículos para optimizar la operación y mejorar la productividad”, finaliza.
Ventajas
Otro de los nichos importantes en esta industria es la venta de refacciones y accesorios para las motocicletas. Se trata de una gran oportunidad, ya que cada vehículo vendido necesitará en su momento nuevos acumuladores, tornillos, parrillas, llantas, bujías, accesorios, calaveras… mientras que los conductores necesitan cascos, ropa de protección, lentes y zapatos para conducir.
De acuerdo con los expertos la principal ventaja de formarse como técnico especialista de motocicletas es la diversidad de ramas profesionales existentes dentro de este campo a las que puedes optar: desde trabajar en un taller convencional, hasta un puesto de mecánico dentro de un equipo de competición o incluso colaborando en el desarrollo y la investigación de nuevas tecnologías para el mundo de la moto.
Aseguran los especialistas que con el paso de los años la tecnología de las motocicletas es cada vez más compleja, haciendo indispensable adquirir los correspondientes conocimientos de electrónica específica y de herramientas avanzadas, diferenciándose así de los “mecánicos de la vieja escuela” y consolidando de esta manera un puesto laboral en el sector.