WASHINGTON, noviembre 25.- Altos funcionarios militares de Estados Unidos se están reuniendo con mandatarios de naciones caribeñas esta semana, luego de que el gobierno de Donald Trump incrementó su presencia naval en la región como parte de lo que llama una campaña contra el narcotráfico.
El secretario de Defensa estadounidense, Pete Hegseth, viajará a Santo Domingo, República Dominicana, y se reunirá el miércoles con los principales líderes del país, incluido el presidente Luis Abinader, el ministro de Defensa, el teniente general Carlos Antonio Fernández Onofre, y otros funcionarios, informó el Pentágono el martes.
El anuncio se produjo el mismo día en que el general Dan Caine, jefe del Estado Mayor Conjunto y principal asesor militar de Trump, se reunió con la primera ministra de Trinidad y Tobago, Kamla Persad-Bissessar.
Según un resumen publicado por la oficina de Caine, "intercambiaron puntos de vista sobre los desafíos que afectan a la región del Caribe, incluidos los efectos desestabilizadores de los narcóticos ilícitos, el tráfico de armas y personas, y las actividades de organizaciones criminales transnacionales".
El ejército de Estados Unidos ha desplegado su mayor presencia en la región en generaciones, y desde principios de septiembre ha estado atacando lanchas que según dice son usadas para el contrabando de drogas. Hasta la fecha, el ejército estadounidense, bajo el mando de Hegseth, ha atacado a 21 de dichas embarcaciones y matado al menos a 83 personas.
Las acciones son vistas por muchos como una táctica de presión para que el presidente venezolano Nicolás Maduro renuncie. Las visitas de Hegseth y Caine esta semana se producen mientras Trump evalúa si tomar acción militar contra Venezuela, lo cual no ha descartado a pesar de haber planteado la posibilidad de conversaciones con Maduro, quien ha sido acusado de narcoterrorismo por Estados Unidos.

