Ciudad de México, México, 13 de diciembre. El Pleno del Senado de la República aprobó, con 118 votos, un dictamen que tiene el objetivo de garantizar el acceso a un internet seguro y libre de violencia, a fin de proteger los derechos fundamentales de los menores.
Para tal efecto, el proyecto busca reformar la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, a fin de establecer que el Estado promoverá políticas de prevención, protección, atención y sanción del ciberacoso y de todas las formas de violencia que causen daño a la intimidad de este sector de la población, así como de cualquier otra forma que provoque daño a su privacidad, seguridad y dignidad, mediante el uso de tecnologías de la información y la comunicación.
El dictamen, que se remitió al Ejecutivo Federal, precisa que, con el uso de nuevas tecnologías e internet, como parte fundamental de la vida de la población, resulta indispensable proteger a la niñez y la adolescencia de agresiones y cualquier tipo de violencia que pudiese dañar sus derechos.
De acuerdo con el Balance Anual 2023 de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), 2.9 millones de menores entre 12 y 17 años fueron víctimas de ciberacoso, lo que representa 22.6 % de los usuarios de internet en ese rango de edad.
Por ello, es fundamental que el Estado mexicano cuente con un marco normativo adecuado, que les permita implementar las políticas que garanticen el acceso y uso seguro de los menores a internet.
El presidente de la Comisión de Derechos Digitales, Luis Donaldo Colosio Riojas, destacó que junto con los beneficios y oportunidades que brinda el Internet, surgen riesgos como el ciber acoso y otras formas de violencia digital que vulneran derechos como la privacidad, la seguridad y la dignidad.
Por ello, el dictamen responde a una necesidad urgente de reforzar el marco legal, para prevenir, atender y sancionar estas problemáticas, sobre todo porque en México más de 81 % de la población de seis años o más utiliza el internet, con una participación destacada de los adolescentes de entre 12 y 17 años, quienes representan 92.4 % de los usuarios menores de edad.