Cambio climático en México deja a la niñez en la vulnerabilidad

Sequías prolongadas, olas de calor, inundaciones y ciclones, representan un riesgo creciente

Cortesía World Vision México.jpg
Cortesía World Vision México
Redacción
Nacional
Share

En el marco del Día Mundial del Medio Ambiente 2025, es fundamental reconocer que México se encuentra entre los países con mayor vulnerabilidad ante el cambio climático, debido a su posición geográfica, la fragilidad de sus ecosistemas y las condiciones socioeconómicas de su población.

Los efectos del cambio climático, como sequías prolongadas, olas de calor, inundaciones y ciclones, representan un riesgo creciente, sobre todo en regiones donde la pobreza y las desigualdades sociales dificultan una respuesta oportuna y efectiva.
Esta situación es particularmente preocupante para la niñez y adolescencia. De acuerdo con el Atlas Nacional de Vulnerabilidades al Cambio Climático (ANVCC), en México existen 83 municipios con “tercer nivel de vulnerabilidad”, afectando a casi 3 millones de personas, de las cuales más de la mitad son mujeres.

Se estima que 872,645 son niñas, niños y adolescentes. A nivel regional, en América Latina y el Caribe, 9 de cada 10 niñas y niños están expuestos al menos a dos crisis climáticas y ambientales.
Según el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), generar una cultura climática en México es fundamental para transformar patrones de producción y consumo, así como para fomentar una ciudadanía informada, consciente y participativa.

Las niñas, niños y adolescentes, uno de los grupos más vulnerables frente al cambio climático, tienen también el potencial de convertirse en los mayores agentes de cambio, siempre que se le garantice acceso a la información, espacios de participación y educación ambiental desde edades tempranas.

Ante este panorama, World Vision México, a través del modelo Regeneración Natural Gestionada por Agricultores (FMNR, por sus siglas en inglés), promueve un enfoque sostenible, económico y replicable para restaurar tierras degradadas, recuperar cobertura vegetal y mejorar los medios de vida rurales. Este modelo contribuye a la adaptación comunitaria al cambio climático, fomentando resiliencia en las zonas más afectadas.

Asimismo, World Vision México se suma a los esfuerzos que perfilan una estrategia nacional rumbo a 2025–2030, orientada a promover entornos prósperos y resilientes para la infancia. Esto lo hace mediante el trabajo coordinado con comunidades, liderazgos locales, organizaciones basadas en la fe, instituciones públicas y organizaciones de la sociedad civil, fomentando acciones integrales para proteger a niñas, niños y adolescentes y garantizar su desarrollo en un entorno seguro y sostenible.

“En World Vision consideramos que la acción climática debe apuntar a las comunidades más vulnerables, incluidos los contextos frágiles y urbanos. Debe centrarse en la niñez, ser inclusiva y apoyar el empoderamiento social y económico de las mujeres. Consideramos que debemos apoyar a las comunidades para que desarrollen su resiliencia, se adapten al cambio climático y para que se preparen, mitiguen, enfrenten y se recuperen de los impactos inmediatos de los desastres relacionados con el clima. Todos los niños tienen derecho a la salud y a un ambiente seguro hoy, además de un futuro sostenible.” Director Nacional de World Vision México.

Para garantizar un medio ambiente sano que asegure el bienestar de los más vulnerables y no deje a nadie atrás, World Vision México hace un llamado a:

Gobiernos, corporaciones y sociedad civil para actuar con urgencia en la protección de la niñez y adolescencia frente al cambio climático.
Fortalecer la rendición social de cuentas y promover la participación activa de niñas, niños y adolescentes en los procesos de decisión.
Dirigir la acción climática a las comunidades más vulnerables, con enfoque en infancia, inclusión y empoderamiento económico y social de las mujeres.Invertir en programas de restauración ambiental que fortalezcan la seguridad alimentaria y medios de vida sostenibles.
Apoyar a las comunidades para desarrollar resiliencia, prepararse y recuperarse de los impactos climáticos actuales y futuros.
El Día Mundial del Medio Ambiente nos recuerda que no hay tiempo que perder. La protección de la infancia frente al cambio climático es un deber ético, social y ambiental.

×