Marchas violentas cuestan más de mil millones de pesos al comercio y turismo

Ciudad de México, 19 de noviembre de 2025.- La Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de la Ciudad de México (Canaco CDMX) advirtió que las marchas con actos violentos generan un costo de protección superior a 1,056 millones de pesos anuales para las empresas ubicadas en los principales corredores de manifestaciones, particularmente en el trayecto del Ángel de la Independencia al Zócalo capitalino.
En este corredor se concentran 4,735 unidades económicas de los sectores comercio, servicios y turismo —de acuerdo con datos del INEGI—, que cada vez enfrentan mayores riesgos a la integridad de sus empleados, clientes, transeúntes y turistas, así como daños directos a su propiedad privada.
De acuerdo con estimaciones de la Canaco CDMX, el gasto promedio para proteger un negocio durante las marchas alcanza los 2,702 pesos en el sector comercio y servicios, mientras que en el sector turismo asciende a 48,641 pesos por evento. Algunas empresas destinan hasta 8% de su gasto operativo total a medidas de seguridad, según la Agrupación de Seguridad Unida por México (ASUME).
El costo de contratar seguridad privada se ha vuelto prohibitivo para muchos pequeños negocios: un guardia armado puede costar entre 400 y 1,000 pesos por hora, mientras que un servicio mensual básico para una pequeña empresa oscila entre 16,000 y 32,000 pesos. La vulnerabilidad del sector aumenta porque el 80% de las Pymes no cuentan con seguro, de acuerdo con la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), por lo que deben absorber directamente los gastos de reparación y reposición de aquello que fue dañado.
Además del gasto en seguridad, las marchas violentas también provocaron una pérdida en ventas estimada en más de 388 millones 900 mil pesos de enero hasta octubre de 2025, afectando de manera directa la actividad económica del comercio, los servicios y el turismo de la Ciudad de México.
La Cámara de Comercio de la Ciudad de México exige a las autoridades capitalinas que pongan alto a los delincuentes disfrazados de manifestantes, quienes atentan contra la integridad de las personas, los negocios legítimamente establecidos, el mobiliario urbano y el patrimonio histórico de nuestra ciudad.