SAMUEL GARCÍA, EL BISOÑO GOBERNADOR QUE QUISO BURLAR LA LEY

Ángel Hernández
Nacional
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SAMUEL GARCÍA
Fotografía Cortesía

La aventura de Samuel García como precandidato a la Presidencia de la República por el partido Movimiento Ciudadano (MC) terminó en medio del escándalo y el ridículo por sus intentos de violar la ley al tratar de imponer a su sucesor en la gubernatura de Nuevo León sin tener esa atribución e impulsar a sus simpatizantes a ingresar de manera violenta al Congreso para impedir la designación del nuevo mandatario estatal.

El imperito gobernador, quien afirma encabezar la nueva política mexicana, no dio muestras de esa supuesta cualidad y recurrió a chicanadas, artilugios legales y violaciones a la Constitución local para imponer a su secretario general de Gobierno, Javier Navarro, como encargado del despacho mientras él se iba a la precampaña presidencial tras la licencia de seis meses que le concedió el Congreso neolonés.

Por ese acto autoritario, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) y un juez de distrito ratificaron que al Congreso de Nuevo León le correspondía elegir al gobernador interino.

La ambición política de García al pretender ser precandidato presidencial y a la vez mantener el control del gobierno del estado propició una grave crisis política estatal, inestabilidad atribuida a su inmadurez, capricho, inexperiencia y desconocimiento de la ley.

Quedará para la historia de la ignominia en Nuevo León la irrupción de la turba de simpatizantes de García en el Congreso, cuando trataron de evitar que los legisladores nombraran al gobernador interino, lo que provocó que la sesión se suspendiera mientras dirigentes locales de MC incitaban a increpar a los diputados.

Fracaso

Sin embargo, fracasó el intento de golpe a la legalidad de los partidarios de García y al final la mayoría de los diputados nombró como gobernador interino a Luis Enrique Orozco Suárez, quien fungía como vicefiscal del Ministerio Público.

A lo largo de cuatro días Nuevo León vivió en medio de una crisis política y legal, pues del 29 de noviembre hasta el 2 de diciembre hubo de hecho dos gobernadores: el designado legalmente por el Congreso y el impuesto violando la ley por Samuel García.

Más interesado en proteger sus intereses que en velar por el bien de la entidad y sus gobernados, valiéndose de la burla y haciendo el peor servicio posible a su estado y al país, al final García anunció el sábado 2 de diciembre que regresaba como gobernador y ponía fin (a regañadientes) a su efímera aspiración como precandidato presidencial.

La lección de esta crisis en Nuevo León es que Samuel García, quien proclama representar a la nueva política, se burló de la ley, violó la Constitución local y quiso imponer sus condiciones en contra de la legalidad, con lo que pierde la política del país y deja muy mal parado a MC de cara a la elección de 2024.

Samuelazo

23 de octubre Samuel García solicita licencia para ir por la candidatura a la Presidencia por MC.

12 de noviembre Se registra como candidato único de MC.

15 de noviembre El TEPJF revoca la designación de gobernador interino de José Antonio Aguilar Salinas, hecha por el Congreso estatal, por estar impedido para ocupar el cargo.

19 noviembre García emite un decreto para dejar como encargado de despacho al secretario general de Gobierno, Javier Navarro.

21 de noviembre Inicia su precampaña.

29 de noviembre Una turba de sus simpatizantes irrumpe en el Congreso local para tratar de evitar la designación del gobernador interino.

2 de diciembre La SCJN emite una suspensión que respalda el nombramiento de Luis Enrique Orozco como gobernador interino.

2 de diciembre García anuncia que abandona la precandidatura a la Presidencia y regresa como gobernador.

4 de diciembre Orozco renuncia como gobernador interino.