Cientos de miles de migrantes salieron este sábado a las calles en diversas ciudades de costa a costa en Estados Unidos para presionar al Congreso a que apruebe una reforma migratoria comprensiva y que el gobierno frene las deportaciones.
Las marchas convocadas por activistas bajo el lema: “El Día Nacional por la Dignidad y el Respeto” buscan que se apruebe ya una reforma migratoria, cuyo proyecto fue avalado en el Senado, pero que se encuentra estancado en la Cámara de Representantes.
Las marchas arrancaron después del mediodía en lugares como Miami, Nueva York, Filadelfia y Chicago. Los organizadores esperaban que unas 150 ciudades se unieran a las manifestaciones durante el día.
Como parte de la movilización a favor de una reforma migratoria en Estados Unidos, el próximo martes habrá una concentración y un concierto gratuito en el National Mall de Washington.
La movilización es apoyada por la Alianza para la Ciudadanía, una coalición de organizaciones que incluyen a la AFL-CIO (la principal gremial de Estados Unidos), la Unión Estadunidense por las Libertades Civiles (ACLU) y el Centro Legal de Pobreza en el Sur.
Tantos legisladores demócratas como republicanos habían cooperado en los últimos meses en el tema de la reforma y eso hizo aumentar la confianza de que la legislación podría ser aprobada, con lo que se beneficiarían unos 11 millones de migrantes indocumentados.
Pero la crisis de Siria y ahora el cierre parcial del gobierno por una disputa presupuestaria entre ambos partidos en el Congreso, han desviado la atención de los legisladores.