De acuerdo con el informe ‘Migrantes somos y en el camino andamos’ del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan A.C, en México 2 millones de indígenas migran en el interior del país para realizar actividades de agricultura en condiciones que vulneran sus derechos.
En el Foro: “Situación de los derechos humanos de las y los jornaleros agrícolas”, que se realizó en el Senado, especialistas de la sociedad civil, legisladores y representantes del gobierno federal expusieron la situación en que viven estás personas y se comprometieron para cambiar la situación.
Abel Barrera del centro de la Montaña Tlachinollan, explicó que en el país cerca de 2 millones 405 mil 414 personas, de manera temporal o permanente, realizan actividades de agricultura en diferentes zonas o campos agrícolas del país, de ellos 58.5% provienen de Chiapas, Guerrero, Oaxaca y Veracruz.
Barrera detalló que Guerrero ocupa el primer lugar a nivel nacional de migración interna, en el último año se registraron desplazamientos de más 40 mil indígenas. Los principales destinos son Sinaloa, Sonora, Baja California, Baja California Sur y Chihuahua.
¿Por qué migran?
Las razones de la migración interna de indígenas, explicó Barrera son:
- Los indígenas dejan de sus lugares de origen para trabajar en campos agrícolas como jornaleros o jornaleras como estrategia de sobrevivencia.
- El 73.9% de los municipios de Guerrero, no tienen la capacidad de brindar alternativas de empleo a su población.
- Las familias indígenas sólo cosechan cerca de 300 kilos de maíz en la temporada de lluvias, lo cual les alcanza para comer durante dos meses, por lo que tienen que salir en busca del alimento que les hace falta para mantener a su familia.
Problemas que enfrentan
El informe señala que durante la migración, los indígenas son víctimas de serías violaciones a sus derechos laborales, como:

Propuestas y acciones
Barrera señaló que para evitar que la migración siga, las políticas públicas deben atacar el problema de raíz y dar a las familias las oportunidades de desarrollo y servicios básicos para que no tengan que salir de su tierra.Victoria Cruz, asesora de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), destacó que la agricultura es uno de los trabajos más peligrosos, por lo que exhortó al gobiernos federal a crear medidas de atención con visión de derechos humanos para atender a ésta población migrante.
La senadora Luisa María Calderón, secretaría de la comisión de Asuntos Indígenas del Senado, destacó que el Congreso debe trabajar en leyes que: mejoren las condiciones de vida de las zonas expulsoras, si una familia decide migrar darles condiciones dignas, establecer esquemas flexibles para la estancia de las familias, y que los hijos de los jornaleros tengan condiciones obtimas de educación.
Manuel Oliver Anzuelo, de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social, detalló que el gobierno federal hace frente a la situación con un promedio de 50 mil visitas a a centros agrícolas para prevenir y erradicar la violación de sus derechos, además de que tiene en marcha un programa para reconocer a las empresas de todo el país que cuentan con una política que ayude a contribuir al desarrollo las familias jornaleras.
Perfil de los indígenas migrantes - 55% son hombres- 45% son mujeres - 52% tienen entre 16 y 60 años. - 42% son menores de15 años. - 20% de los menores de edad trabaja. - 55% no saben ni leer ni escribir. - 45.4% no acudió a la escuela. - 35% percibe ingresos inferiores a los 115 pesos al día. - 65.6% tiene un ingreso mensual menor a 3 mil pesos. |