El rector de la UNAM, José Narro Robles, afirmó categóricamente que “la violencia no tiene cabida” en esa institución al dejar claro que los principios universitarios son irrenunciables y “nos obligan a todos”.
“En este momento complejo para nuestra institución convoco a todos los integrantes de nuestra comunidad a permanecer unidos, a rechazar las provocaciones, actuar con mesura y sentido universitario y trabajar con mayor intensidad”, externó.
El rector de la máxima casa de estudios leyó un amplio documento en el que fijó su postura en torno al conflicto que se generó en el Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH), que derivó en la toma y posterior entrega de las instalaciones de la dirección general de este sistema educativo.
Dijo que los problemas en la Universidad se tienen que superar a través del debate racional y la construcción de acuerdos y que en el proceso debe imperar el respeto a esta casa de estudios y a su comunidad.
Pidió a los grupos que causaron el problema en el CCH que reflexionen y les expresó que la rectoría a su cargo ha actuado y actuará con firmeza, pero con prudencia, con apego a la legalidad, pero sin extremismo equivalentes como los realizados por el grupo violento.
Esto a unas horas de que se instale la primer mesa de diálogo entre las autoridades y jóvenes del CCH para discutir el tema de las expulsiones de quienes afectaron la vida institucional del plantel Naucalpan.