Acabar de manera frontal con la incesante inseguridad que genera la delincuencia organizada desde hace tres décadas en materia de robos, extorsión, secuestro, tráfico de enervantes, asalto a trenes y ordeña a ductos de Pemex, entre otros ilícitos, será la finalidad de cerca de 50 mil efectivos —repartidos en 265 coordinaciones regionales— que integrarán la Guardia Nacional con un mandato de la ciudadanía de carácter urgente: la pacificación del país.
Mientras comerciantes, productores del campo, empresarios y ciudadanos que todos los días salen a laborar, a la escuela, a la recreación o simplemente a la convivencia social viven diariamente la zozobra que les causa la inseguridad, por fin las diversas fuerzas políticas representadas en el Congreso de la Unión lograron ponerse de acuerdo para la gestación de esta nueva institución que tendrá el resguardo de la seguridad pública en todo el territorio nacional.
Tres meses después de que el aún presidente electo Andrés Manuel López Obrador presentó formalmente la propuesta para crear la Guardia Nacional —durante la exposición del Plan Nacional de Seguridad 2018-2024, el 14 de noviembre de 2018— el Senado de la República aprobó por unanimidad, en un acuerdo histórico y con los votos de 127 legisladores, la creación del nuevo organismo de seguridad pública.
La iniciativa aprobada, coinciden los analistas, fue reformada en el Senado para frenar todo riesgo de que eventualmente se militarice la nueva institución, al tiempo que finalmente otorga a las Fuerzas Armadas un marco legal para tareas de seguridad pública.
Cambios
El dictamen que se votó este jueves 21 de febrero ante el pleno de la cámara alta incluyó cambios importantes en su conformación: la directiva de la Guardia Nacional será de carácter civil, con doctrina policial y adscrita a la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana (SSPPC), eliminando con ello el mando mixto civil-militar que se proponía, al quitar la Junta de Jefes del Estado Mayor para dar pie a una coordinación operativa interinstitucional, con una temporalidad de cinco años en sus funciones.
Esta coordinación interinstitucional con las Fuerzas Armadas se dará con las secretarías de la Defensa Nacional y de Marina-Armada de México, que participarán conforme a la ley con la SSPPC para el establecimiento de su estructura jerárquica, así como sus regímenes de disciplina, cumplimiento, responsabilidades, tareas y de servicios.
También serán las encargadas de la instrumentación de normas de ingreso, educación, capacitación, profesionalización, ascensos y prestaciones, que serán semejantes a las existentes en el ámbito militar.
Se establece incluso un plazo de entre 60 y 90 días para que el Poder Legislativo apruebe al menos tres leyes secundarias: la Ley General para el Uso de la Fuerza, Ley Orgánica de la Guardia Nacional y Ley Nacional de Registro de Detención, así como modificaciones a los artículos transitorios de la Ley del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
La formación y el desempeño de los integrantes de la Guardia Nacional y de las instituciones policiales, según lo aprobado, se regirán por una doctrina policial fundada en el servicio a la sociedad, la disciplina, el respeto a los derechos humanos, al imperio de la ley, al mando superior y a la perspectiva de género.
También se expone que mientras entra en vigor el decreto y la Guardia Nacional integra su estructura y capacidades, el Ejército y la Marina trabajarán en tareas de seguridad pública.
No obstante el dictamen no modificará el artículo 13 de la Constitución, por lo que se deja fuera la posibilidad de que los elementos de la Guardia cuenten con fuero militar, al ser constituida como “una institución plenamente civil”.
Refiere que los gobernadores no dejan de lado su obligación de garantizar la seguridad pública, por lo que los Ejecutivos de las entidades federativas presentarán ante el Consejo Nacional de Seguridad Pública —en un plazo que no exceda de 180 días a partir de la entrada en vigor del decreto— el diagnóstico y el programa para el fortalecimiento del estado de fuerza y las capacidades institucionales de sus respectivos cuerpos policiales estatales y municipales.
Lo que sigue en el proceso legislativo es que el dictamen regrese a la Cámara de Diputados (que es la cámara de origen) para su análisis y eventual aprobación; después el dictamen debe enviarse a los Congresos locales para que al menos 17 de los 32 que integran el Constituyente Permanente den su visto bueno, por tratarse de una reforma a la Carta Magna.
Cabe señalar que a esta institución le acompañará, según declaró el presidente López Obrador, la organización del territorio nacional en 265 coordinaciones regionales para integrar esta fuerza de seguridad en función de la incidencia delictiva de cada zona.
Estructura
De acuerdo con la minuta aprobada en el Senado con los cambios que derivaron de diversos cónclaves del Parlamento Abierto es necesario que “la Federación cuente con una institución policial de carácter y dirección civil denominada Guardia Nacional, responsable de las tareas de seguridad para la salvaguarda de la vida, la libertad, la integridad y el patrimonio de las personas, y la preservación de los bienes y recursos de la nación”.
Al respecto, la “ley determinará la estructura orgánica de la Guardia Nacional adscrita a la secretaría del ramo de seguridad. La dependencia del ramo de seguridad formulará el programa nacional en la materia, así como los respectivos programas operativos, políticas, estrategias y acciones”.
En tanto, “la dependencia del ramo de la Defensa Nacional dispondrá lo necesario para que la estructura jerárquica, la disciplina, el régimen de servicios, los ascensos, las prestaciones, el ingreso, la profesionalización y el cumplimiento de las responsabilidades y las tareas de la Guardia Nacional estén homologados a los que se aplican en el ámbito de la Fuerza Armada”.
En materia de recursos humanos destaca que “la formación, la capacitación y el desempeño de los integrantes de la Guardia Nacional se regirán por una doctrina policial fundada en la disciplina, el acatamiento de las órdenes superiores, el respeto a los derechos humanos y la perspectiva de género en el ejercicio de sus funciones”.
En cuanto a su operatividad frente a la ciudadanía se advierte que “los detenidos (por la Guardia Nacional) deberán ser puestos a disposición en instalaciones de las autoridades civiles que correspondan; las instituciones de seguridad pública, incluyendo la Guardia Nacional, serán de carácter civil, disciplinado y profesional”.
Otras disposiciones importantes son de carácter judicial. “La investigación de los delitos corresponde al Ministerio Público, a las policías y a la Guardia Nacional; estas dos últimas actuarán bajo la conducción jurídica del primero en el ejercicio de esta función; el Ministerio Público, la Guardia Nacional y las instituciones policiales deberán coordinarse entre sí para cumplir los objetivos de la seguridad pública y conformarán el Sistema Nacional de Seguridad Pública, al que las entidades federativas y los municipios, a través de sus órganos de policía, deberán suministrar la información de que dispongan en la materia”.
Para finiquitar el proceso legislativo se da una ordenanza: “El Congreso tiene la facultad para expedir las leyes sobre la organización, disciplina, profesionalización, operación y evaluación de la Guardia Nacional. Así como expedir la Ley General del Uso Legítimo de la Fuerza y la Ley Nacional del Registro de Detenidos garantizando el respeto de los derechos humanos”.
Con la intención de vigilar la viabilidad de la Guardia se establece que “son facultades exclusivas del Senado analizar el informe anual que el presidente de la República le presente sobre las actividades de la Guardia Nacional; y los miembros del Ejército, Fuerza Aérea, Armada y Guardia Nacional se regirán por sus propias leyes”.
También apunta que “los delitos cometidos por elementos de la Guardia Nacional serán conocidos por la autoridad civil competente y, por otro lado, las faltas y los delitos contra la disciplina militar serán conocidos por las autoridades y tribunales militares que correspondan”.
Fechas
Se espera que esta semana se revise y apruebe la iniciativa en la cámara baja y de ahí se traslade a la votación de los 32 Congresos estatales.
Una vez concluido ese proceso parlamentario las fechas para el comienzo de operaciones de la Guardia Nacional se ejemplifican en los artículos transitorios del dictamen.
“El presente decreto entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el Diario Oficial de la Federación y dentro de los 90 días siguientes a la entrada en vigor de este decreto el Congreso de la Unión expedirá la Ley de la Guardia Nacional”, puntualiza.
De manera inmediata “la Guardia Nacional se constituirá a la entrada en vigor del presente decreto con los elementos de la Policía Federal, la Policía Militar y la Policía Naval que determine en acuerdos de carácter general el presidente de la República”.
Como apoyo a la Guardia se plantea que “el Sistema Nacional de Seguridad Pública implementará un esquema de fortalecimiento del estado de fuerza y las capacidades institucionales de los cuerpos policiales bajo objetivos cuyos resultados sean verificables, además de que se establecerá un plazo de 30 días posteriores al tercer año de la constitución de la Guardia Nacional para que el Ejecutivo federal envíe a ambas Cámaras del Congreso una evaluación integral del desempeño de la Guardia Nacional, así como de los resultados que en materia de seguridad se hayan obtenido”.
Beneplácito
El presidente López Obrador se dijo satisfecho con la aprobación en el Senado de la reforma constitucional para crear la Guardia Nacional, que contará con el apoyo de las Fuerzas Armadas, las cuales ahora tendrán un marco legal para garantizar paz y tranquilidad en el país.
“Fue un hecho trascendente e histórico. La reforma permite que las Fuerzas Armadas nos ayuden en labores de seguridad pública. Esto no se había logrado en muchos años y había una situación irregular, no apegada a la Constitución. Ahora tendrán un marco legal para ayudar en labores de seguridad, con el propósito de dar el giro a las Fuerzas Armadas”, expresó el mandatario.
Afirmó que con el cambio constitucional poco a poco, de manera gradual y respetando los derechos humanos, se dará un giro para que la defensa nacional no sea el único objetivo de las Fuerzas Armadas. “Ahora lo que más nos importa y se necesita es lograr la paz y la tranquilidad al interior del país. Y para eso será de gran ayuda la participación legal del Ejército y la Marina”, comentó.
Tras destacar que en la reforma se da en una etapa de cambios, de separación de poderes y de democratización, López Obrador confió en que se apruebe también en la Cámara de Diputados “en los mismos términos, por mayoría calificada como establece la ley, y que pase a los estados para su aprobación”.
El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana,Alfonso Durazo Montaño,de igual forma celebró el consenso logrado para crear la Guardia Nacional.
Reiteró que el pleno del Senadoaprobó por unanimidad la reforma y recalcó que “se tratará de un cuerpo policial de excelencia conadscripción civil y formación homologada a la militar”.
Por ello, Alfonso Durazo aplaudió la aprobación y subrayó: “Es un gran triunfo de todas y todos los senadores lograr ese nivel de consenso en un tema tan controvertido”.
Ricardo Monreal, líder de la fracción de Morena en el Senado, declaró que las estrategias de combate a la violencia implementadas en los últimos años han sido insuficientes. “Los cuerpos de seguridad están marcados por una debilidad institucional. Con la nueva institución buscamos prevenir y atacar el delito”, asevera.
Aclara que la Guardia Nacional será un cuerpo policial disciplinado y que su base será policía militar, naval y federal. “Se les homologará en adiestramiento y jerarquía. Si bien se les va a homologar con las Fuerzas Armadas eso no significa militarización, al contrario: en un inicio su base es policía militar pero no es el soldado convencional”.
Agrega que todo aquel elemento de la Guardia que cometa un delito será investigado por la autoridad civil correspondiente. “Reconozco que la oposición tuvo que ver mucho para estas modificaciones porque ahora tenemos un Parlamento abierto en el que se respeta a todos los coordinadores”.
Su homólogo de la fracción del PRD, Miguel Ángel Mancera, comenta que “ha triunfado la razón sobre la emoción. Tendremos una nueva policía nacional que cumple con disposiciones internacionales. Tenemos modificaciones a diez artículos constitucionales y siete transitorios”.
Dante Delgado, de Movimiento Ciudadano, destaca el hecho de que la Guardia Nacional no tendrá un mando mixto ni Junta de Jefes de Estado Mayor. “Todos los elementos que pasen a la Guardia serán civiles y no se reformará el artículo 13 constitucional, por lo que el fuero de la Guardia será civil”, determina.
Miguel Ángel Osorio, líder de los priistas en el Senado, aclara que la intención de su grupo parlamentario siempre fue sumar y mejorar la propuesta. “No actuamos pensando en partidos, porque eso es lo que el país requiere: anteponer un interés general sobre los particulares. Reconozco al bloque mayoritario (Morena) su disposición de ajustar los planteamientos iniciales. Fue gracias a la oposición que se lograron cambios de forma y fondo”.
El panista Mauricio Kuri afirma en tanto que se pasó de una guardia militar a una guardia civil nacional. “El mando será civil. La presencia militar no se extenderá más allá de 2023 y nuestras familias estarán protegidas y volverá la paz”, explica.
Eduardo Ramírez, presidente de la Comisión de Estudios Legislativos Segunda de Morena, expone que “con esta propuesta tendremos un órgano que garantice irrestrictamente la seguridad interior con profundo respeto a los derechos humanos. La Guardia Nacional con carácter civil que se propone nos da esas garantías y significa la oportunidad para que finalmente las Fuerzas Armadas dejen gradualmente de realizar tareas de apoyo a la seguridad pública y regresen a sus cuarteles y a sus bases marítimas”.
El sector privado reconoció al Senado por la aprobación unánime de la reforma, pero indicó que esa corporación no debe llevar a “la militarización de la seguridad pública en el país con esquema de mando civil”.
Juan Pablo Castañón, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), reconoció a los legisladores de todas las fuerzas políticas ya que mantuvieron un diálogo y hubo consenso.
Agregó que el establecimiento de un mando civil responde a las demandas de los ciudadanos y “con la fórmula aprobada, además, se fortalece la certidumbre jurídica para las Fuerzas Armadas, dándoles un marco legal para su actuación transitoria en la lucha contra la inseguridad”.
El presidente nacional de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Gustavo de Hoyos, reconoció a “los grupos del Senado de la República por el ejercicio de Parlamento abierto y la concentración para la aprobación unánime de la Guardia Nacional”.
De esta manera comienza el camino hacia el objetivo central por el que se pidió la creación de la Guardia Nacional: terminar con la incesante inseguridad producida por los grupos comunes y otros más altamente organizados que violentan la libertad, el Estado de Derecho y, sobre todo, la tranquilidad de millones de mexicanos.
La Guardia Nacional buscará la pacificación del país como eje toral para el futuro desarrollo de México.
Cambios
Minuta presentada en la Cámara de Diputados (cámara de origen) 16 de enero de 2019 | Texto modificado en el Senado (acordado por los grupos parlamentarios) 20 de febrero de 2019 |
Propuso un fuero militar para los elementos de la Guardia Nacional en caso de faltas y delitos contra la disciplina militar. | Elimina el fuero militar, dejando a la Guardia Nacional bajo el fuero civil. |
Previó la creación de una Junta de Jefes de Estado Mayor compuesta por integrantes de las dependencias de los ramos de Seguridad, Defensa Nacional y Marina. | Se determina que la dirección de la Guardia Nacional estará adscrita a la secretaría del ramo de seguridad pública y se elimina la Junta de Jefes de Estado Mayor. |
Propuso que la estructura jerárquica, disciplina, régimen de servicios, ascensos, prestaciones, ingreso, profesionalización y el cumplimiento de las responsabilidades y tareas de la Guardia Nacional estén homologados a los que se aplican en el ámbito de la Fuerza Armada permanente. | Establece que la formación y desempeño de los integrantes de la Guardia Nacional y demás instituciones policiales se regirán por una doctrina policial fundada en servicio a la sociedad, disciplina, respeto a los derechos humanos, al imperio de la ley, al mando superior y en lo conducente a la perspectiva de género. |
No previó qué pasaría con la Guardia Nacional que ya estaba constitucionalizada. | Cambia el nombre a la anterior Guardia Nacional a Cuerpos de Reserva, con el fin de no desaparecer este cuerpo. |
Propuso un control parlamentario muy blando, estableciendo que el Senado únicamente analizaría el informe anual con relación a las actividades de la Guardia Nacional. | Fortalece el control parlamentario estableciendo que además de analizar el Senado deberá aprobar el informe anual con relación a las actividades de la Guardia Nacional. |
No establece requisitos mínimos que debiesen contener las leyes reglamentarias de la Guardia Nacional. | Establece requisitos mínimos que deben contener las leyes reglamentarias de la Guardia Nacional. |
No establece la temporalidad y los principios en los cuales se debería regir la actuación de la Fuerza Armada permanente en labores de Seguridad Pública. | Establece la temporalidad (cinco años) y los principios (extraordinaria, regulada, fiscalizada, subordinada y complementaria) en los cuales se debe regir la actuación de la Fuerza Armada permanente en labores de Seguridad Pública. |
No existía la propuesta. | Establece el diagnóstico y el programa para el fortalecimiento del estado de fuerza y las capacidades institucionales de los cuerpos policiales estatales y municipales por parte de los gobernadores. |
Integración
La Guardia Nacional se compondrá con elementos de la Policía Federal, Policía Militar y Policía Naval. Son unidades policiacas que han sido preparadas, capacitadas y con prácticas permanentes para funcionar como policías frente a la comunidad. No son estructuras del Ejército haciendo tareas que no conoce, que no corresponde y que ya han traído problemas. La Guardia Nacional tendrá su propio régimen con requisitos de acceso, permanencia, ascenso y capacitación en materia de uso de la fuerza y respeto a los derechos humanos. En materia de garantías judiciales y respeto a las libertades se prohíbe expresamente que los detenidos sean trasladados o resguardados en instalaciones militares. En todo caso existirá siempre un registro inmediato de la detención. Se reconoce la plena jurisdicción de la Corte Penal Internacional para el Estado mexicano. Los integrantes de la Guardia Nacional serán juzgados por el fuero civil y no por el militar en caso de faltas y delitos.
Leyes secundarias que faltan
Ley de la Guardia Nacional (60 días después de su publicación en DOF).
Ley Nacional de Uso de la Fuerza (90 días después de su publicación en DOF).
Ley Nacional de Registro de Detención (90 días después de su publicación en DOF).
Reformas a la Ley del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Presupuestos 2019
Institución | Presupuesto |
Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) | 93 mil 670 millones 187 mil 410 pesos |
Secretaría de Marina (Semar) | 29 mil 583 millones 375 mil 192 pesos |
Policía Federal | 26 mil 667 millones 846 mil 525 pesos |
Fuente Presupuesto de Egresos de la Federación 2019
Integración de la Guardia Nacional
Año | Institución | Elementos |
2019 | Sedena | 14,833 |
2019 | Semar | 6,337 |
2020 | Sedena | 14,430 |
2021 | Sedena | 14,400 |
Total | 50,000 |
Fuentes: Sedena, Semar y Gobierno de la República
Fuerzas Armadas en 2018
Institución | Elementos |
Sedena (Ejército y Fuerza Aérea) | 215,276 |
Semar | 65,605 |
Policía Federal (incluye la División de Gendarmería) | 37,293 |
Policía Militar | 36,000 |
Policía Naval | 10,000 |
Total | 364,174 |
Fuentes: Sedena, Semar y Policía Federal
Escenario
De acuerdo con la respuesta a diversas peticiones de información realizadas por Vértigo por medio del INAI a las secretarías de Gobernación y Defensa Nacional, así como la ex Procuraduría General de la República y la Policía Federal, la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador recibió un país con la presencia de seis cárteles y más de 80 células delictivas que operan en las 32 entidades con capacidades muy sofisticadas de armamento y organización: desde la producción, trasiego y venta de enervantes, pasando por secuestro, extorsión, robo de vehículos, de transporte y huachicol, hasta el aumento de asesinatos. El nuevo gobierno enfrenta los niveles más altos de violencia e inseguridad de la historia reciente de México. Además, los 50 municipios con más homicidios se distribuyen en 18 entidades. En total, esos municipios concentraron cuatro mil 980 averiguaciones previas y carpetas de investigación por homicidio entre enero y julio de 2018. Si se toma en cuenta que a nivel nacional se registraron once mil 257 crímenes, dichos municipios acumulan más de 40% de la violencia homicida.
Principales modificaciones a la Constitución
Artículo Modificación | ||||||||||||||
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