México, Ciudad de México, 23 de julio. El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que el Fondo Monetario Internacional (FMI) debería ofrecer disculpas a México por el daño que le causaron sus políticas neoliberales, y dijo desconfiar de sus pronósticos de crecimiento económico.
“No les tengo mucha confianza a esos organismos, ellos fueron los que impusieron la política neoliberal. Todos ellos deberían ofrecer disculpas al pueblo de México y hacer autocrítica”, señaló en su conferencia de prensa matutina al enumerar las “políticas dañinas” del FMI.
“Deberían decir ‘lo que propusimos resultó un fracaso y causamos un grave daño a los mexicanos porque dijimos que con la privatización iba a haber crecimiento y empleo (...), que había que disminuir al Estado y apostar al mercado, que la globalidad era la panacea y con las reformas estructurales, válgame Dios, iba a llegar la felicidad para el pueblo’”, expresó.
López Obrador afirmó que “nada de eso ocurrió, al contrario, la política neoliberal terminó en aumento de impuestos, paralización de la economía, en quitarle derechos a los trabajadores, afectar la dignidad de los maestros, dejarnos sin médicos por el afán de privatizar la educación, caída en la producción petrolera, más dependencia en la compra de combustibles”.
Agregó que las “recetas” del FMI provocaron que se desataran la violencia y la inseguridad y cuestionó: "¿cómo van a estar ahí opinando?, ¿qué autoridad moral tienen?, con todo respeto”.
El jefe del Ejecutivo aclaró que México no va a renunciar a esos organismos, porque “formamos parte del sistema financiero mundial, pero no quiere decir que no sepamos lo que han significado sus políticas”.
“Ahora ellos ya no van a decidir sobre la agenda de México, eso se terminó ya”, advirtió tras invitar “a los expertos del FMI, a los expertos, a los tecnócratas, a los nostálgicos del neoliberalismo, a que veamos si es lo mismo crecimiento que desarrollo”.
En su opinión, crecimiento es que se genere riqueza, pero “puede ser que ese crecimiento signifique solo acumulación de riqueza en unos cuantos”, pues acusó que en el “periodo neoliberal” México llegó a ser el cuarto país con más multimillonarios, mientras crecía la desigualdad.
Agua en La Laguna
Por otra parte, el presidente aseguró que a petición de los ciudadanos, los recursos que se usarían para el Metrobús de La Laguna, entre los estados de Durango y Coahuila, serán empleados para llevar agua a esa zona.
“La gente en Usumacinta no aceptó el Metrobús, no lo acepta, la mayoría ya sea a mano alzada o en urnas, lo cierto es que la gente no quiere ese obra”, señaló sobre este proyecto que ya estaba autorizado y uniría las ciudades de Torreón, Coahuila, y de Gómez Palacio y Lerdo, Durango.
Con los pobladores de dicha zona, mencionó el mandatario, existe el compromiso de llevar agua, para lo cual se valora la construcción de un acueducto desde la presa Francisco Zarco, en Lerdo, Durango.
“Estamos viendo si lo podemos hacer con un acueducto de la presa Zarco que está como a 50-60 kilómetros; vamos a invertir en eso, en un acueducto, para que se tenga agua, lo primero: agua de calidad para la gente”, apuntó López Obrador.
Recordó que un acto en Gómez Palacio se encontró con una gran protesta contra el Metrobús, “y uno sabe cuándo es una protesta montada, manipulada y cuando se trata de una protesta espontanea, auténtica, o en lo general, aunque no dejan de haber intereses particulares, pero así todos en contra”.
Ante esta manifestación, el mandatario federal mencionó que preguntó a los ciudadanos qué hacer con los recursos destinados para ese medio de transporte, a lo que respondieron que su principal necesidad es contar con agua.
“La necesidad de La Laguna, la principal necesidad, es el agua; entonces la gente dice agua, pues va a ser agua y voy a argumentar, a profundizar, sobre el tema; tiene un problema serio en La Laguna de sobreexplotación de los acuíferos. Entonces como ya se está perforando muy profundo hay contaminación en algunos casos de arsénico”, señaló.