‘Hacer de Pemex una empresa transparente, eficaz y sólida’
La situación financiera de Pemex es apremiante: al cierre de 2015 registró una pérdida neta de 521 mil siete millones de pesos.
Foto: Cuartoscuro
Georgianna Meza
Política
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El 8 de febrero anterior el presidente Enrique Peña Nieto nombró a José Antonio González Anaya nuevo director general de Petróleos Mexicanos con un doble objetivo: “Acelerar la transformación de Pemex para aprovechar al máximo las oportunidades que le brinda la reforma energética (…) y al mismo tiempo lograr su fortalecimiento financiero y productivo en un contexto de bajos precios internacionales del petróleo”.
El jefe del Ejecutivo se refería a la caída de 47% en promedio del precio del barril durante 2015 y de más de 70% desde junio de 2014, pasando de más de 100 dólares a menos de 30 dólares al cierre de enero.
Nueve días después, el 17 de febrero, Luis Videgaray, secretario de Hacienda, y Agustín Carstens, gobernador del Banco de México, anunciaron una serie de cambios en la política monetaria del país para subsanar justamente la caída de los ingresos por las exportaciones petroleras, además de apuntalar la cotización del peso frente al dólar.
Los ajustes dados a conocer por ambos funcionarios incluyen una reducción al gasto del gobierno en 2016 por 132 mil 300 millones de pesos, de los cuales, especificó Videgaray Caso, “a Pemex le toca el mayor sacrificio”, con un recorte de poco más de 20% del presupuesto que se le había asignado para este año, equivalente a 100 mil millones de pesos.
Con ello Petróleos Mexicanos ajustará proyectos petroleros con altos costos de producción, reducirá sus gastos corporativos y administrativos, buscará ahorros en compras impulsando una mayor competencia entre sus proveedores y se concentrará en actividades estratégicas con el propósito de lograr las economías que requiere para hacer frente al recorte presupuestal.
ESPECIAL/NOTIMEX
60208234. México, 8 Feb. 2016 (Notimex-Presidencia).- El presidente, Enrique Peña Nieto tomó la protesta de Ley a José Narro Robles como Secretario de Salud; a Mikel Arriola Peñalosa como Director General del Instituto Mexicano del Seguro Social; y a José Antonio González Anaya como Director General de Petróleos Mexicanos. NOTIMEX/FOTO/PRESIDENCIA/COR/POL/
Realidad
La situación financiera de Pemex es apremiante: al cierre de 2015 registró una pérdida neta de 521 mil siete millones de pesos, reflejo de la drástica caída en los precios del crudo en los mercados internacionales, de los malos resultados obtenidos por Pemex Exploración y Producción; del impacto en el tipo de cambio del peso frente al dólar, así como del pago de impuestos y derechos al gobierno federal y el de intereses por deuda.
Actualmente la deuda total de la empresa productiva del Estado rebasa 80 mil millones de dólares, incluido un pasivo laboral de casi 1.8 billones de pesos.
“Como el resto de las compañías petroleras del mundo, Pemex enfrenta la severa caída en los precios del petróleo y como tal tiene que ajustarse a esta nueva realidad: petróleo a 25 dólares el barril. Es el propósito fundamental del programa de ajuste anunciado por la Secretaría de Hacienda”, señala José Antonio González Anaya.
En entrevista exclusiva con Vértigo, el nuevo director general de Pemex subraya que “la honrosa distinción del presidente de la República de pensar en mí para este puesto es un honor. Tenemos la urgencia de tratar de enfrentar el problema y que Pemex asuma la nueva realidad que enfrentamos con el petróleo a 25 dólares por barril, así que el presidente me dio indicaciones muy claras: ajustar la estructura de costos, la estrategia de negocios y utilizar al máximo la reforma energética”.
—El planteamiento, el diagnóstico es muy preciso: es un problema en el corto plazo de liquidez y no de solvencia. El objetivo son 100 mil millones de pesos, una estrategia de eficiencias, diferir programas…
—Me han ayudado mis años en Hacienda y en el Seguro Social a tratar de ver estos problemas con cierta metodología y cierta rigurosidad, aprendiendo de mucha gente y de buenos amigos. El programa de negocios, el programa de gasto de Pemex, se hizo con un precio del petróleo de 50 dólares y se cayó a la mitad. Suena poco, pero habría que preguntarle a cualquier empresario las repercusiones de hacer planes para vender algo a 50 y se lo empiezan a comprar a 25. No hay nada que pueda hacer al respecto, y eso nos lleva claramente a un ajuste en la estrategia de negocios y en el gasto.
PARAISO, TABASCO, 18MARZO2015.- El Presidente Enrique Peña Nieto durante la conmemoración del 77 aniversario de la Expropiación Petrolera en la cual, al mismo tiempo, se presentó la plataforma “Yunuén”, que tiene una capacidad de perforación de más de nueve kilómetros de profundidad. FOTO: CUARTOSCURO.COM
Solvencia
Al explicar de dónde surge la cifra de 100 mil millones en el ajuste al presupuesto de la empresa para este año, indica: “Es sorprendentemente, diría yo casi diabólicamente, sencillo: cada cinco dólares menos en el precio del barril nos provoca afectaciones por 20 mil millones de pesos. No sabíamos cómo se iba a aplicar el ajuste, pero casi a la semana que asumí el cargo sabíamos que la meta eran 100 mil millones. Así lo anunciaron el secretario de Hacienda y el gobernador del Banco de México”.
—En su diagnóstico la palabra que más llama la atención es “solvencia”, lo cual significa una empresa con viabilidad, una empresa que pueda responder, una empresa con futuro…
—Sin duda. Se nos cayeron los ingresos en el corto plazo. Tenemos gastos que habíamos calculado de otra manera, así que enfrentamos un problema de liquidez. Pero Pemex cuenta con un enorme acervo de activos relacionados con el crudo, de infraestructura petrolera… y además está asentado en una enorme reserva petrolera.
Por medio de la reforma energética, añade, se hacen las licitaciones de ciertos bloques, “pero Pemex se quedó con una parte enorme. Entonces, no tengo la menor duda de la viabilidad a largo plazo de la empresa, de su solvencia y solidez”.
Líneas de acción
El director general de Pemex recuerda que de acuerdo con lo aprobado por el Congreso de la Unión la empresa debe manejar un déficit financiero de 150 mil millones de pesos para este año. “¿Qué debemos hacer para mantener ese déficit cuando se nos caen los ingresos?”, cuestiona. Y responde: “Tenemos que recortar nuestro gasto en 100 mil millones. El déficit quedó establecido en el Presupuesto de Egresos de la Federación para 2016, con lo cual es más complicado cambiarlo. Y tampoco parece deseable hacerlo: incrementar ese déficit implica un mayor grado de endeudamiento y no está claro que esa sea la mejor estrategia a estas alturas del partido”.
González Anaya asegura que para hacer frente a la situación financiera de Pemex sin afectar de manera importante la plataforma de producción (la reducción del gasto implica 100 mil barriles diarios menos), así como cumplir los compromisos laborales y financieros de la empresa, se llevarán a cabo tres líneas de acción: la primera de ellas es generar eficiencias y reducir costos para incrementar la productividad, con lo que se esperan ahorros por 28 mil 900 millones de pesos; el segundo rubro replantea inversiones por un total de casi 65 mil millones de pesos, comprometiendo lo menos posible la producción futura, y por último, ajustar el gasto de operación de inversión para que esta pueda ser rentable en el entorno actual, lo que equivaldrá a seis mil 200 millones de pesos.
En las eficiencias y reducciones de costos, precisa, habrá disminución de viáticos y de gastos generales, entre otros rubros.
Acerca del aplazamiento de inversiones, pone un ejemplo: “Teníamos una inversión de casi diez mil millones de pesos en aguas profundas para un proyecto que iba a empezar a producir dentro de diez años. Claramente no es el mejor uso de los recursos; sobre todo, y esto es importantísimo, si la reforma energética nos permite hacer el mismo proyecto de otra manera que no requiere tantos recursos de la empresa: Pemex puede atraer recursos de un tercero; tecnología de un tercero y compartir el riesgo con un tercero”.
Con relación a la tercera línea de acción, subraya, “debemos enfocarnos en las actividades que son rentables. Tenemos yacimientos de petróleo de diferentes costos. Hay algunos que eran rentables a 50 dólares, pero que ya no lo son, al igual que otros que ya no son rentables a 25. Pemex, como empresa productiva del Estado, debe enfocarse a actividades redituables”.
JAVIER LIRA/NOTIMEX
41205010. México, D.F.- Mañana sábado último gasolinazo del año, magna a 13.31, Premium 14.11 y Diesel a 13.94, informó la Asociación Mexicana de Empresarios Gasolineros (Amegas) NOTIMEX/FOTO/ARCHIVO/JLO/EBF/
Buen inicio
Pemex Exploración y Producción será la filial que mayor afectación sufrirá por el recorte al presupuesto de Petróleo Mexicanos, pues registrará un ajuste de 46 mil 800 millones de pesos, por lo que será obligada a reducir gastos, dejará de invertir en aguas profundas y campos con un costo de producción superior a los 25 dólares por barril.
—En la producción hay un recorte de 100 mil barriles diarios y se tiene que llegar a ser operativos con los que sí pueden ser rentables, por abajo de los 25 dólares. ¿Cuál es el costo de la extracción en promedio?
—Es menor, pero hay muchas maneras de calcularlo. Es difícil porque, ¿qué incluyes? ¿Los gastos de operación? ¿O el gasto de exploración, de inversión y demás? Lo que hicimos fue un ejercicio para detectar cuáles pozos tienen valor presente neto positivo con precios de 25 dólares. Y hago una aclaración: la reforma energética nos permite asociarnos con quienes tal vez cuenten con tecnologías que si con nuestros costos no eran rentables a 25 dólares con la de ellos sí. Si así ocurre, evidentemente se elevará la producción.
—En el entorno actual de la empresa parece que todos los frentes son adversos: caída del precio del petróleo, pérdida cambiaria, caída de las ventas... ¿Por dónde empezar a plantearse este escenario?
—Primero, asumiendo la realidad. Diciendo: el petróleo está a 25 dólares. No hay nada que hacer. La prioridad es poner los números y las finanzas en cierto orden, que haya cierta estabilidad y credibilidad hacia afuera.
—¿Cuál es el periodo para evaluar que se va en el camino correcto?
—Es difícil. Acabo de cumplir tres semanas en el cargo y se hizo un ajuste de esta magnitud; 100 mil millones se dice fácil, pero es una cantidad enorme de recursos. Que se haya logrado tener un plan para atacar este tema es un buen principio, y así lo comentó el subsecretario de Ingresos de la Secretaría de Hacienda, Miguel Messmacher, quien considera que es un paso sólido, positivo, en la dirección correcta. Yo creo que ahí vamos y que falta mucho por hacer.
—Los inversionistas y acreedores están muy pendientes de cuál es el siguiente paso, y una de las preocupaciones es la calificación de deuda, la valoración de la empresa misma…
—Creo que teníamos que empezar con el anuncio del recorte, que no es el más afortunado inicio, pero tenía que ser algo creíble. Hacer este tipo de planes es difícil, pero es más difícil ejecutarlos. Ahora tenemos que enfocarnos en su ejecución y que sea de manera creíble.
Fortaleza
José Antonio González se dice convencido de que este ajuste “más que debilitar a Pemex lo fortalece; lo llevará a que sea la empresa emblemática del país, como siempre ha sido, y a devolverle la fortaleza en este entorno que se deterioró muy rápido. Hace poco más de un año el petróleo estaba cerca de 100 dólares; la caída es significativa.
—Implantar planes de choque como este crea tensiones al interior de la empresa: empleados, pensionados, en fin…
—Este es un esfuerzo de todo Pemex y así se los dije a los directores cuando empezamos a articular este proceso. Les recalqué que este no es un problema del área de Finanzas; es un problema de Pemex, y no podemos dejar que Finanzas vea el tema con Pemex Exploración y Producción. Todas las empresas de Pemex tienen que entrarle a este problema, porque la empresa, llamémosle coloquialmente “la gallina de los huevos de oro”, es Pemex Exploración y Producción, la más grande, la de mayor presupuesto. Y es ahí donde viene una buena parte de los ajustes, pero todo el resto de la organización tuvo que participar. Y en este sentido es lo que vamos a hacer: todos tenemos que poner un poquito.
Al mencionar algunos de los ajustes ya aplicados a nivel corporativo, cita que “por ejemplo en la parte de eficiencias eliminamos-compactamos dos direcciones corporativas: la de Recursos Humanos y la de Investigación de Negocios, la investigación petrolera. Es parte de un adelgazamiento corporativo, así que todos vamos a tener que entrarle”.
—¿A cuánto ascienden los pasivos de la empresa, incluyendo el laboral, que se sabe es uno de los más fuertes?
—El pasivo laboral asciende a cerca de 1.8 billones de pesos. Es un pasivo que se fue materializando a través de muchísimo tiempo, y la deuda total de Pemex sobrepasa los 80 mil millones de dólares.
—¿Es posible reducir la carga fiscal de la empresa, o dicho de otro modo despetrolizar aún más las finanzas públicas?
—Voy a ser muy respetuoso y muy cuidadoso con lo dicho por el subsecretario Messmacher al respecto. El ajuste es un buen primer paso que permite que empiece a haber pláticas sobre montos, modalidades, tiempos de un posible cambio en ese aspecto... Vamos a trabajar sobre eso y abordarlo.
ESPECIAL/NOTIMEX
51203146. Houston, 3 Dic 2015 (Notimex-Especial).- Petróleos Mexicanos (Pemex) inauguró hoy aquí su primera estación de gasolina en Estados Unidos, la estación es propiedad de Mike Virani, un inmigrante paquistaní. NOTIMEX/FOTO/ESPECIAL/EBF
Objetivos
La metamorfosis de la ahora empresa productiva del Estado empezó con la reforma energética aprobada en el Senado de la República el 11 de diciembre de 2013 y por la Cámara de Diputados un día después, y considerada por el gobierno federal como la transformación más importante en el país en los últimos 65 años, al permitir la inversión privada nacional y extranjera en las industrias petrolera y de generación de electricidad.
—Uno de los mandatos del presidente fue darle impulso, continuar en la reforma energética. Después de las licitaciones de las rondas 0 y 1, ¿qué sigue?
—Lo que tiene que hacer Pemex es su parte en este sentido. Y lo digo con toda claridad: hacer este ajuste sin la reforma energética sería mucho más difícil, porque hoy podemos diferir esta inversión de diez mil millones de pesos en aguas profundas, voltearnos y tratar, intentar conseguir un socio a través de una de las figuras que nos da la reforma energética y tener la producción de todas maneras. Eso no se podía sin la reforma.
Lo mismo ocurre con actividades de refinación, agrega: “Podemos diferir la inversión en la modernización de nuestras refinerías, voltearnos, conseguir un socio y de todas maneras tenerlas. Es así como vamos a buscar alcanzar nuestros objetivos. Se oye fácil, pero será difícil. Lo que tenemos que buscar es hacerlo de la manera más transparente, más competitiva y que más beneficie a Pemex y al país”.
—Otro de los problemas que se han señalado para la empresa es el referente al robo de combustibles. ¿Cuál es el plan para enfrentarlo?
—Hay un tema muy importante: recientemente se aprobó una ley —que a mí no me tocó impulsar, pero se agradece al Congreso de la Unión— que penaliza, que marca como delito el robo de combustible. Eso no existía, y eso nos ayuda, al igual que el cambio de estrategia que estoy pensando: atacar los mercados a los que va el combustible robado, aunque cuando se tienen decenas de miles de kilómetros de ductos resulta complicado “cachar” a la gente in fraganti; pero la gente no roba el combustible para uso propio: lo roba para llevarlo a otro lado. Hay que llegar a ese otro lado. Vamos a trabajar de manera conjunta con el SAT y con otras instancias.
Monetización
En opinión de expertos Pemex cuenta con varias opciones para obtener liquidez a corto plazo, entre ellas la colocación de la llamada Fibra E, mediante la cual se pondrían en el mercado diversos activos de la empresa y solo en caso necesario acceder la capitalización proveniente del gobierno.
—¿Se ha considerado la bursatilización de las acciones de la empresa como una forma de financiamiento? ¿Qué otras estrategias de monetización se consideran?
—Analizamos todas las posibilidades para mejorar el financiamiento, pero algo que quiero destacar es que ninguna de esas acciones son parte de este programa de ajuste. Lo consideraremos como ingresos adicionales. La monetización nos permite tener ingresos en este momento, pero hay que aplicar la máxima de las finanzas públicas: no hay que usar ingresos temporales para gastos permanentes; y si la caída en ingresos es permanente hay que hacer ajustes en el gasto permanentes. Hay una serie de programas de monetizaciones, de bursatilizaciones, incluso de algunas ventas de activos y vamos a llevarlas a cabo; pero eso no es parte de los 100 mil millones.
—Se adelantó la fecha para la importación de gasolina por parte de particulares…
—Pemex ha estado trabajando desde hace tiempo y la empresa participará. Me parece que Pemex seguirá jugando y debe seguir jugando un papel preponderante en el mercado energético del país; y vamos a ser un competidor más, un gran competidor, un competidor amigable, pero un competidor. La misión de Pemex es dual: tiene que ser rentable y además promover como empresa del Estado el desarrollo del sector energético y de la economía del país. Y estos dos objetivos son compatibles.
Saul Lopez
FOTO: SEMAR /CUARTOSCURO.COM
Guerra de precios
La gran polémica en estos momentos es la guerra de precios del petróleo a nivel mundial. —¿Cuál es el escenario que tiene la empresa acerca del futuro de los precios del crudo?
—Es parte del ajuste. El consenso entre los especialistas y ministros de Energía reunidos en Houston hace unos días es que los precios no caerán de manera significativa, pero tampoco subirán mucho más; que más o menos se estarán moviendo por el resto del año como se encuentran ahora y que se dará una pequeña alza en los años inmediatos. Aunque el que presume saber siempre se acaba equivocando; nadie sabe, porque es un mercado sumamente volátil. Nosotros planeamos un promedio de 25 dólares para 2016.
—¿Cuáles son sus expectativas acerca de cómo concluirá Pemex este año?
—Creo que debemos alcanzar nuestras metas financieras, lo cual es muy importante. Tenemos que cumplir el ajuste de los 100 mil millones de pesos y apegarnos a la meta de déficit financiero de 150 mil millones. Alguien podrá decirme que soy un financiero, pero no puede haber orden si no se pone orden en las metas financieras; es un prerrequisito.
Me gustaría que al concluir el año podamos tener ya algunas historias de éxito en las cuales ya utilicemos las nuevas figuras de la reforma energética. Que podamos decir: ya tuvimos una asociación aquí, un farm out (asociación estratégica en explotación y producción con un tercero) allá… Esa es mi visión y ojalá la alcancemos.
—¿Hay un tiempo estimado que debe transcurrir para sanear totalmente a Pemex?
—Lo desconozco, pero lo que sí sé es que vamos a trabajar todos los días con una enorme intensidad para tener la empresa que Pemex es, que debe ser y en la que debe convertirse hacia adelante. Eso sí puedo decirlo. Y aunque estamos en un mercado muy competitivo y no será fácil, nuestro objetivo es hacer de Pemex una empresa transparente, eficaz y sólida.
Mensajes
Para concluir la entrevista con Vértigo, José Antonio González Anaya envía tres mensajes: “El primero va dirigido a los trabajadores. Lo he dicho con insistencia: uno de los grandes activos de esta compañía son los ingenieros y sus trabajadores, que por décadas construyeron el sector petrolero de este país. Desde 1938 toda la industria petrolera de México se debe a los ingenieros y a los trabajadores de Pemex. Estamos enfrentando un reto difícil, y me asumo parte de ello, pero hay talento y debemos enfrentarlo con entereza”.
El mensaje a México, destaca, “es que vamos a trabajar todos los días para devolverle la solidez a la empresa emblemática del país, que es Pemex. Insisto: la empresa está enfrentando problemas de liquidez, mas no de solvencia, pero sí podemos fortalecerla. México debe contar con una empresa productiva del Estado que sea rentable, que contribuya al desarrollo del sector energético y económico del país, y que sea transparente y eficiente en beneficio de sus ciudadanos”.
Finalmente, el mensaje del director general de Pemex a los acreedores e inversionistas: “Petróleos Mexicanos es una empresa solvente y con viabilidad a largo plazo, que cumplirá con sus obligaciones financieras, reducirá gastos y priorizará los proyectos de inversión”.
José Antonio González Anaya
El director general de Petróleos Mexicanos nació en Coatzacoalcos, Veracruz. Es licenciado en Economía por el Instituto Tecnológico de Massachusetts y doctor en Economía por la Universidad de Harvard.
Fue economista para el Banco Mundial (1996-2000) e investigador y profesor para el Centro de Análisis para el Desarrollo de la Universidad de Stanford.
En la administración pública federal de México se ha desempeñado como coordinador de asesores en la Subsecretaría de Hacienda y Crédito Público (2002-2003); responsable de la Unidad de Seguros, Valores y Pensiones (2003-2006), y como coordinador de Entidades Federativas (2006-2012).
El 4 de diciembre de 2012 fue designado director general del Instituto Mexicano del Seguro Social por el presidente Enrique Peña Nieto.
Desde el 8 de febrero asumió su nuevo puesto en la Dirección General de Pemex.
Es coeditor del volumen Reformas macroeconómicas en Latinoamérica: la segunda ronda y autor de La descentralización en México en una encrucijada y La flexibilidad laboral en 13 países de Latinoamérica y Estados Unidos, entre otras obras.