El transporte ferroviario, indispensable para la movilización de mercancías a lo largo y ancho del país, se ha visto afectado en el más reciente lustro por una cadena de ilícitos que van desde bloqueos a sus vías de tránsito, pasando por el robo de vagones o mercancía, hasta el descarrilamiento provocado de trenes completos, lo que da lugar a que las firmas que operan en México inviertan recursos extra para su resguardo y seguridad.
Con total impunidad y violando el Estado de Derecho el crimen común y organizado afecta de manera considerable a este medio de transporte, como sucedió apenas el pasado 19 de septiembre en la comunidad de La Cañada, municipio de Nopala de Villagrán, Hidalgo, donde unos sujetos bloquearon con llantas las vías del paso del ferrocarril para intentar saquearlo: el alto total del tren provocó que otra locomotora cargada de maíz que circulaba por la misma vía no visualizara al ferrocarril detenido y ambos descarrilaran.
Por ser un delito federal la Fiscalía General de la República (FGR) inició una carpeta de investigación por el delito de robo de mercancía en vagones del tren y por el caso solo hay dos personas detenidas como presuntos responsables.
Robos
En poder de Vértigo el Reporte de seguridad en el sistema ferroviario mexicano. Primer trimestre 2019, realizado por la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario (ARTF), determina que durante este periodo se presentaron en total tres mil 694 eventos, de los que se tienen mil 57 casos de robo y dos mil 637 actos vandálicos.
Dentro de la categoría “robo a tren” los estados que más contribuyeron a este rubro durante el primer trimestre de 2019 son Sonora (92 eventos o 15.01%), Tlaxcala (81 eventos o 13.21%) y Jalisco (65 eventos o 10.60%). Tan solo estos tres estados representan en conjunto 38.82% del total de robos a producto/carga.
Cabe señalar que 72.43% de los robos a producto/carga ocurren en vías principales.
En cuanto al robo a vía esta categoría alcanzó un total de 371 incidencias, lo que corresponde con un crecimiento de 32.97%, incremento que se explica por el alza de 36.29% respecto del trimestre anterior en el rubro de robo a componentes de vía, el cual pasó de 259 a 353 eventos en el actual periodo y que, además, representa 95.15% del total de robos a vía.
De 505 actos que corresponden a la categoría de “vandalismo al tren” solamente 132 son catalogados como vandalismo en vía: el número total de estos ilícitos se incrementó en 17.93% del cuarto trimestre de 2018 al primer trimestre de 2019: el número de sucesos de cierre de angulares —interrupción de válvulas de los frenos de las locomotoras, que obliga a detener la marcha del tren—registró mil 306 incidencias ocurridas durante el primer trimestre de 2019, teniendo un aumento de 369 eventos.
Los estados que más contribuyeron al vandalismo a material rodante en el primer periodo de 2019 son Tamaulipas (269 eventos o 25.35%), San Luis Potosí (189 eventos o 17.81%) y Nuevo León (177 eventos o 16.68%). Dichos estados, en conjunto, representan 59.84% del total de vandalismo a material rodante.
Mientras que las entidades con mayor incidencia en el cierre de angulares son Sonora (282 eventos o 21.59%), Coahuila (153 eventos o 11.72%), Tlaxcala (100 eventos o 7.66%), Guanajuato (96 eventos o 7.35%) y Sinaloa (90 eventos o 6.89%).
Operativos
En la Cámara de Diputados el secretario de la Comisión de Infraestructura, Jorge García (MC), lanzó un exhorto a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana —mediante un punto de acuerdo— para que instrumente e intensifique operativos de vigilancia en las zonas que registran alta incidencia de robo y vandalismo en perjuicio del sistema ferroviario, violando impunemente el Estado de Derecho.
García precisó que estos hechos ilícitos se han incrementado de manera notable. “Los ladrones de trenes durante el primer trimestre de 2019 aumentaron sustancialmente sus operaciones, así como los niveles de violencia en la sustracción ilegal de granos, semillas, autopartes y material de construcción, de los trenes que circulan a través de toda la geografía nacional”, explicó.
Añadió que “todo el territorio nacional, salvo la península de Baja California, tiene vías férreas, por lo que todos los días circula por el país una enorme cantidad de mercancías que representan un fuerte atractivo para la delincuencia”.
Y puntualizó que “el modo de operar más común es colocar piedras y ramas en el riel para obligar al maquinista a frenar y que un grupo armado robe la mercancía; otras veces atacan en silencio, vandalizan las tolvas para que los granos se esparzan por la vía y mujeres y niños los recojan”.
Dijo que el ferrocarril es un agente promotor del crecimiento económico y comercial de México. “Se requiere de un sistema ferroviario moderno y eficiente; pero sobre todo de acciones que garanticen plenamente su seguridad. Urge contar con una estrategia de seguridad para este transporte, con lo cual se allanará el camino para elevar el nivel de competitividad del país”, comentó.
Pérdidas
En cuanto a los esfuerzos por frenar los robos las empresas del sector efectúan fuertes inversiones. Ferromex, por ejemplo, destina 50 millones de pesos mensuales en medidas de seguridad y sufre 740 robos al mes, que promedian nueve mil incidentes al año. “En más de 68% de los casos son delitos cometidos por el cierre de angulares (freno de emergencia), en el que participan mujeres y niños”, revela Rogelio Vélez, director general de la firma.
Cuando se aplica el freno de emergencia el tren detiene la marcha de manera automática, momento que aprovechan las bandas delictivas para abrir las compuertas de los carros de ferrocarril y extraer principalmente granos, maderas, acero y autopartes. “La pérdida es muy grande, tanto para el cliente como para nosotros ya que debemos contratar a nuestras fuerzas de seguridad, que alcanzan costos hasta por 50 millones de pesos al mes; esto es, 1.5% de nuestras ganancias”, concluye el directivo.
Infraestructura ferroviaria en México
Está compuesta por 17 mil 360 kilómetros de vía principal y secundaria concesionada, cuatro mil 474 de vía auxiliar (patios y laderos) y mil 555 de vías particulares, las cuales en conjunto suman 23 mil 389 kilómetros de vía operada.
Su participación en el movimiento de carga terrestre se ha incrementado en los últimos años, movilizando durante 2017 más de 126 millones de toneladas.
De la carga movilizada, 63.2% es de comercio exterior (77.1 millones de toneladas), que se divide en 59.3 millones de toneladas de carga de importación y 17.8 millones de toneladas de carga de exportación.
Fuente: Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario