El autor chino Murong Xuecun, de éxito editorial, tenía casi 4 millones de seguidores en su microblog, pero un día de mayo su cuenta desapareció. También se desvanecieron sus perfiles en varios medios de redes sociales. No recibió ninguna explicación, pero la situación parece bastante clara ahora.
Muchos chinos famosos (desde astros del espectáculo hasta magnates, pasando por periodistas) han conseguido cantidades sustanciales de seguidores y estas personalidades destacadas no siempre le caen bien a la línea del Partido Comunista. Ahora el gobierno está haciendo todavía más estricto su control de internet incomodando a los microblogueros influyentes cuando suben material en línea que no les agrada.
Murong, cuyo nombre verdadero es Hao Qun, es uno de quienes han visto silenciadas sus cuentas de microblog en los últimos meses. En las 2 últimas semanas, los censores de internet han citado a los microblogueros a reuniones y la prensa estatal ha acusado a algunos de socavar el socialismo y promover valores occidentales por medio de mentiras y noticias negativas.
Esta situación no presagia precisamente que la nueva cúpula del Partido Comunista, bajo la dirección de Xi Jinping, tolerará discusiones más libres en internet y en la prensa oficial.
Muchas de las personalidades en línea llaman la atención sobre injusticias sociales y cuestionan políticas del gobierno. Algunos son partidarios de la democracia, la libertad de palabra y los derechos humanos, mientras que otros son radicales que suponen que China se ha desviado de sus raíces comunistas.