La pigmentación u oscurecimiento de las axilas es resultado de una inflamación derivada de la depilación del vello en forma continua por máquina, rastrillo o cera. La piel, al tratar de protegerse de la agresión, aumenta la producción de melanina: de ahí que en las personas morenas o de piel oscura se produzca un exceso de coloración, misma que disminuye cuando se elimina el factor traumático.
“En la depilación se jala el folículo piloso (cavidad donde nace el pelo), lo cual genera una inflamación local, misma que en las personas de piel morena o negra, causará una mayor pigmentación”, explicó la dermatóloga Marcela Saeb Lima, integrante de la Fundación Mexicana para la Dermatología (FMD).
La especialista en neoformaciones melanocíticas y tumores anexos a la piel advierte que existen otros factores que también provocan pigmentación de las axilas, como el uso de desodorantes y antitranspirantes en personas con una epidermis más sensible, la cual se conoce como paraquetosis granular de la axila y se identifica porque existe ardor y comezón en una o ambas axilas.
“Esto es producto de una alergia o dermatitis por contacto, donde la piel produce más células pigmentarias y el tono se vuelve más oscuro. La solución a ello es evitar el agente desencadenante”, recomendó.