Muchos cardiólogos consideran embarazoso hablar a sus pacientes sobre las relaciones sexuales. Pero nuevas directrices indican que deberían hacerlo temprano y a menudo para informar a los sobrevivientes de infartos que la intimidad sexual es posible.
Las discusiones deben incluirlo todo, desde cuándo y cómo reanudar las actividades sexuales hasta cuáles posiciones podrían ser mejores para algunos casos y no aconsejables para otras, según una declaración de consenso emitida este lunes por la Asociación Estadounidense del Corazón y la Sociedad Europea de Cardiología.
La declaración se considera la primera en la comunidad científica con directrices detalladas sobre la reanudación de relaciones sexuales tras un infarto u otra enfermedad del corazón y está basada en un estudio de textos médicos.
“La salud sexual es una parte importante de la salud general de un individuo”, incluso para los pacientes más ancianos, dijo Elaine Steinke, investigadora y profesora de Enfermería en la Universidad Estatal de Wichita, en Kansas. Steinke fue la autora principal de la declaración publicada en las revistas Circulation, de la Asociación Estadounidense del Corazón, y European Heart Journal.
Muchos pacientes pueden reanudar las relaciones sexuales luego de consultarlo primero con sus médicos, y la respuesta a muchas preguntas depende de la salud general del paciente, indican las directrices. Los pacientes con dolores leves y estables de pecho enfrentan un bajo riesgo de un problema cardíaco a consecuencia de las relaciones sexuales. Los pacientes con problemas más severos deben posponerlas hasta que su estado se haya estabilizado.