La congestión de tráfico se ha incrementado a nivel mundial como resultado de un aumento del crecimiento poblacional y la urbanización. Dicha congestión reduce la eficiencia de la infraestructura de transporte, incrementa el tiempo de viaje, además de provocar un mayor consumo de combustible y por ende más contaminación.
En busca de solucionar este problema día con día en el mundo se intenta hacer eficientes los sistemas de transporte en seguridad, comodidad y beneficios, tanto ambientales como económicos, para el usuario.
Bajo este concepto surgen los Sistemas Inteligentes de Transporte (SIT), los cuales aplican tecnologías tanto a la infraestructura como a los vehículos y sus usuarios con el objetivo de agilizar el tránsito y beneficiar a los traslados.
Seguridad
Una de las prioridades del transporte es la seguridad. Durante los últimos años varios equipos de ingenieros de todo el mundo han desarrollado en diferentes laboratorios un sistema de conectividad inalámbrica entre vehículos capaz de evitar situaciones de riesgo que puedan terminar en accidentes graves o mortales.
Tras cientos de pruebas de fiabilidad, un sistema denominado V2V (Vehicle to vehicle), comenzará a instalarse en coches de fabricación estadunidense durante el próximo año y a partir de 2017 en algunos modelos europeos.
La comunicación V2V consiste en un sistema de seguridad con el que los coches podrán detectarse y comunicarse entre ellos en la carretera a través de un dispositivo GPS instalado en una computadora a bordo. De este modo se podrá, sin necesidad de perder la atención en el camino, alertar a otros conductores sobre posibles riesgos y peligros en la circulación. Así, un coche parado por avería notificará automáticamente a todos los que estén cerca de su situación y de su estado con el fin de evitar algún inconveniente.
El radio de acción de esta señal alcanzará los 300 metros aproximadamente. El objetivo de los sistemas V2V es reducir el número de accidentes de tráfico.
Otra de las ideas para aprovechar la tecnología en favor del conductor y que puede salvar vidas es un prototipo de camión elaborado por la empresa Samsung y bautizado como Safety truck (Camión seguro). La idea es que un conductor que viene detrás de un camión pueda rebasarlo en una carretera de dos carriles minimizando algún percance.
Para ello se incorporó a Safety truck una cámara en su parte delantera y cuatro pantallas en su parte posterior a fin de mostrar al conductor del auto que circula detrás a los vehículos que pasan por el otro carril. Esta iniciativa pretende evitar frenazos repentinos o accidentes en el caso de que se encuentren animales que cruzan la carretera.
Ya en circulación está el camión inteligente Freightliner Inspiration Truck, fabricado por la empresa Daimler. Este vehículo, el primero en su tipo con licencia para transitar por autopistas de Estados Unidos, cuenta con cámaras, radares, sensores y un cerebro central que gestiona toda la información, aunque no es completamente autónomo y necesita de un conductor al mando del volante.
La idea es contar con un sistema que apoye al chofer y reduzca su fatiga y estrés luego de conducir durante horas y proporcionar mecanismos para que su conducción sea más eficiente. El camión será responsable de ir a velocidad legal, no salirse del carril y controlar la distancia respecto de otros vehículos.
Medio ambiente
Ofrecer un servicio de transporte público con tecnología amigable con el medio ambiente, calidad y rapidez permite al usuario prevenir sus tiempos de traslado y en muchos casos dejar el automóvil, lo que provoca una menor contaminación.
En este sentido, Reino Unido anunció en 2017 la puesta en marcha de un tren de pasajeros 100% inteligente.
Londres será sede de estos trenes equipados con sensores, controladores, cámaras de videovigilancia, servidores y antenas de comunicación que les permitirán detectar cualquier anomalía dentro de los vagones y reaccionar a ella.
Las máquinas, que serán construidas por Hitachi, la firma responsable de los trenes bala en Japón, podrán comunicarse mediante señales GSM (Sistema Global para las Comunicaciones Móviles, por sus siglas en inglés) con la vía ferroviaria electrificada y el Sistema de Administración de Tráfico para entregar datos de señalización. Su conectividad no solo funcionará para prevenir accidentes o fallas mayores en la red ferroviaria sino que también automatizará operaciones rutinarias como el consumo de energía y riesgo en las estaciones, así como el conteo y seguridad de los pasajeros en cada vagón.
Los 122 trenes que prevé el proyecto alcanzarán una velocidad de 200 kilómetros por hora y reemplazarán a los viejos trenes eléctricos y de diesel.
Movilidad
En general, las autoridades viales tratan de coordinar lo mejor posible la red de semáforos en las ciudades. Sin embargo, la planeación del tiempo del cambio rojo-ámbar-verde a veces pierde sentido, como cuando una avenida presenta mucha carga vehicular y los conductores son detenidos en cruces innecesarios.
La mala sincronización de la red de semáforos cuesta dinero y daña al medio ambiente ante el continuo parar y arrancar que conlleva un consumo de combustible que provoca emisiones de dióxido de carbono, de óxidos nítricos y partículas en suspensión, además de ruido.
Una solución para evitar este problema desde hace varios años son los semáforos inteligentes, que miden por inducción el flujo de tráfico en los caminos y según la carga favorecen una u otra dirección.
Actualmente se investiga la evolución de estos semáforos y en las nuevas propuestas se busca que puedan comunicarse u obtener información ya sea con los teléfonos inteligentes de los conductores o de los propios coches a través de una red móvil o por bluetooth, lo que permitirá medir el número de vehículos y la distancia entre ellos y decidir si se alargan o no las fases de verde.
Pruebas realizadas en Alemania ya presentan consecuencias positivas contra la emisión de contaminantes, pues los autos que circulan de forma constante consumen menos combustible.