El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, urgió una vez más a regular la venta de armas en este país para evitar que incidentes como el ocurrido el viernes 27 de noviembre en Colorado sean normales.
En un mensaje emitido por la Casa Blanca, el mandatario afirmó que cada vez más familias en Estados Unidos temen ser víctimas de tiroteos como el ocurrido en una clínica de salud reproductiva de Colorado Springs, que dejó 3 personas muertas y 9 heridas.
Obama añadió que para ofrecer las condolencias con “una conciencia limpia” a las víctimas de esta clase de ataques, es preciso ajustar las regulaciones a las ventas de armas de fuego en Estados Unidos.
“Debemos hacer algo acerca del fácil acceso a las armas de guerra en nuestras calles, a personas que no tienen razón para obtenerlas. Punto. Ya basta”, enfatizó el presidente estadunidense.
El mensaje fue difundido poco después de que la policía de Colorado Springs identificó al atacante como Robert Dear, de 57 años, y quien será presentado ante la corte el próximo lunes.
El ataque a la clínica de salud reproductiva Planned Parenthood (Paternidad planeada) se registró luego de intensas campañas contra estas instalaciones médicas de parte de grupos conservadores que se oponen al aborto.