Mientras el Congreso de la Ciudad de México aprobó reformas a la Ley de Fomento Cooperativo local con miras a fortalecer e impulsar a esas sociedades para promover la participación de migrantes mexicanos, la Secretaría del Trabajo y Fomento al Empleo en la capital desde el mes de enero lleva a cabo la expedición, resello, renovación y reposición de licencias y credenciales para todos aquellos trabajadores no asalariados.
La diputada priista Silvia Sánchez Barrios, presidenta de la Comisión de Desarrollo Económico, dice que “con las reformas aprobadas se pretende fortalecer a las sociedades cooperativas con el propósito de afianzar su organización y potencializar sus alcances y funciones. Queremos incluir a esas sociedades en los programas de fomento cooperativo para motivar su desarrollo”.
Gracias a la promoción y apoyos de la Secretaría del Trabajo de la CDMX se ha logrado impulsar un mayor número de cooperativas que dan empleo a personas que no tienen otra posibilidad de emplearse en alguna fábrica luego de que a raíz de la pandemia perdieron sus empleos, que no se han recuperado en su totalidad porque muchas fuentes de trabajo cerraron y ya no pudieron volver a abrir por falta de recursos.
“Ahora buscamos que las sociedades cooperativas puedan recibir estímulos fiscales y apoyo económico, principalmente aquellas que cuentan con su plan anual de trabajo. Implementar programas de formación en cooperativismo, economía social y solidaria y consumo local”, indica Sánchez.
Puntualiza que “en el dictamen se plantea impulsar la participación de personas migrantes mexicanas en la constitución e inversión para el desarrollo de cooperativas a través del Sistema de Planeación del Desarrollo y en el consejo económico, social y ambiental”.
Con las reformas aprobadas por los diputados locales se hace un reconocimiento a los mexicanos residentes en el extranjero en lo que se refiere a su participación en el desarrollo de la economía, puesto que como todos sabemos el país recibe cada año millones de dólares por concepto de remesas. Y cuando por alguna razón regresan al país, las sociedades cooperativas representan un incentivo para generar ingresos.
Por su parte, la Secretaría de Trabajo y Fomento al Empleo desde inicio del año expidió y renovó licencias y credenciales para mil 653 trabajadores no asalariados, entre quienes se encuentran aseadores de calzado, estibadores, maniobristas, clasificadores de frutas y legumbres, mariachis, músicos, trovadores y cantantes, organilleros, artistas de la vía pública, plomeros, hojalateros, afiladores y reparadores de carrocerías.
También fotógrafos, mecanógrafos y peluqueros, albañiles, pintores, auxiliares de panteones, cuidadores y lavadores de vehículos, vendedores de billetes de lotería, de publicaciones y revistas atrasadas, entre otros.
De esta manera los trabajadores no asalariados pueden desempeñar su actividad sin que nadie
los moleste, ni tengan que cumplir con otros requisitos. Si algún inspector les pide identificarse, ellos cuentan con su licencia para desempeñar esa labor sin ser molestados por ninguna autoridad, ni los pueden levantar de la vía pública como en el caso de los músicos. ¡Es una ventaja!...
El bolso de Laura…
Ahora déjeme contarle que se avecina otro candente debate en el que morenos y albiazules se darán con todo: se trata de la ratificación de Mariana Boy al frente de la Procuraduría Ambiental y de Ordenamiento Territorial (PAOT) local, a quien se propone ratificar cuatro años más, pero de acuerdo a la norma debería haberse enviado una terna. Veremos…