La oposición saltó al ruedo electoral para disputarle a Morena y sus aliados la atención social. PAN, PRI y PRD optaron por crear un frente amplio y presentaron el método para elegir quien será, llegado el momento, su candidato a la Presidencia en el proceso 2024. Pero el ungido o ungida iniciará como encargado de la construcción de lo que denominaron Frente Amplio por México.
Apreciaron el método avalado recientemente por el Instituto Nacional Electoral (INE) y operado desde su creación por Morena para tropicalizarlo, aunque con algunas variantes.
Los opositores presentaron las tres etapas de que constará el proceso, así como a 15 posibles participantes, de entre quienes saldrá el responsable nacional para la construcción del Frente Amplio por México.
En los primeros días de septiembre darán a conocer al ganador, días antes de que Morena y sus aliados anuncien el nombre del coordinador de los comités de defensa de la 4T, con lo que le restarán reflectores.
Desde ya, la oposición se sube a la disputa por los espacios y el ánimo social, de cara al proceso electoral 2024, cuya principal batalla no será por la Presidencia de la República sino por los espacios en el Congreso de la Unión.
La disputa se centrará, por parte de la oposición, en hacer valer el músculo popular que se mostró en el proceso electoral del Estado de México en junio pasado y en la elección del 2021 en la Ciudad de México. Y con ello evitar que Morena y sus aliados se hagan de la mayoría calificada en el Congreso de la Unión.
En principio, la disputa por la Presidencia pasará a segundo plano y desde ahora puede anticiparse que el resultado no impactará tanto en el futuro nacional, como sí lo hará el hecho de lograr una mayoría opositora o al menos una presencia superior a 30%, tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado.
Con ello la oposición busca nivelar el ejercicio del poder con base en el equilibrio planteado en la Constitución entre el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial.
El proceso
En principio se aprecia que el encargado de liderar los trabajos, como se anticipaba debido a la derrota del PRI en el Estado de México, será el PAN.
La posibilidad de definir al candidato de la oposición se abrirá a la ciudadanía, se requerirán firmas para participar y se utilizarán foros, estudios de opinión y encuestas para definir al ganador.
El 4 de julio iniciará el registro de quienes aspiren a participar ante la Comisión de Registros del PAN, PRI y PRD.
Los inscritos deberán acreditar el respaldo de militantes, simpatizantes o ciudadanos en general, mediante una plataforma electrónica en la que se podrán inscribir hasta 200 mil apoyos.
Quienes acrediten el número de firmas de apoyo requerido participarán en un foro en el que se analizará la visión del país y se aplicará un primer estudio de opinión para elegir tres perfiles.
Los elegidos deberán tomar parte en cinco foros regionales en los que se aplicarán también estudios de opinión.
Los resultados se harán públicos el 3 de septiembre, al tiempo que se realizará una consulta directa a la ciudadanía registrada previamente en la plataforma.
Y finalmente se hará público el nombre del quien será responsable de la construcción del Frente Amplio por México.
Ahora solo falta ver si los consejeros del INE dan su aval al proceso, como lo hicieron con Morena y sus aliados, o no.
De cualquier forma, la oposición comenzó a moverse, pero todo indica que ellos también tienen un plan B y a partir de los resultados que tuvo el pasado proceso electoral tanto en el Edomex como en Coahuila, así como en el proceso de 2021 en las alcaldías de la CDMX, el músculo social les puede alcanzar para evitar que Morena se haga de la mayoría absoluta en el Congreso.
La oposición no está manca. ¡Hay tiro! O al menos así parece. La clave será el voto duro.