Ser madre implica adquirir un conjunto de habilidades, desde la gestión eficaz del tiempo hasta la resolución creativa de problemas, que pueden ser transferidas efectivamente al entorno laboral.
La experiencia maternal fomenta la organización, el compromiso, la responsabilidad, la eficiencia y el manejo de situaciones desafiantes, coinciden Mayra Flores, directora de Atracción y Desarrollo de Talento y Diversidad en Forvia, y Regina Cabal Urquiza, Co-Founder y CEO de Momlancers.
—¿Cuáles son las barreras que dificultan el regreso a la vida laboral de las mujeres que son madres?
—Hay barreras —dice Cabral— tanto internas como externas. Existen las que tienen que ver con cómo se sienten las mujeres que por maternidad han hecho pausas profesionales. Hay muchas de ellas que dicen: “Ya estuve fuera equis número de años, a lo mejor ya no valgo tanto para el mercado laboral”, o “Tal vez lo que sabía hacer ya cambió demasiado”. En este sentido, hemos detectado una importante barrera tecnológica sobre todo con la pandemia.
Además de ello, indica, “le sumaría que les da mucha pena ‘presumir’, hablar de sus logros, de lo picudas que son y de lo que son capaces de hacer”.
Por su lado, Mayra Flores añade que “en cuanto a las barreras que nosotros vemos desde el punto de vista de las empresas está esa idea de que la mujer que es mamá no tiene la disponibilidad de tiempo, su compromiso no estará al 100% con la empresa, no tendrá flexibilidad para la organización ni la prioridad para hacer crecer su carrera profesional”.
No obstante, puntualiza, “nos hemos encontrado con todo lo contrario: las mujeres, y sobre todo las que tienen el compromiso de sacar una familia adelante, son las más comprometidas, sacan más provecho de una manera más rápida de sus competencias y habilidades para cumplir y responsabilizarse tanto de la parte laboral como de la familiar”.
Autoestima
—¿Por qué es importante que las mujeres que son madres tengan independencia financiera?
—De entrada —responde Cabral— tienes más libertad de tomar decisiones, te ayuda a la economía. De acuerdo con el Banco Mundial si las mujeres participaran con la misma tasa que los hombres el ingreso per cápita podría ser 22% más alto. También pueden salir de situaciones de violencia más fácilmente; mejorar la calidad de vida de su familia y aumentar su bienestar en general.
“Y yo agregaría que es también un tema de autoestima, es decir, cuando una mujer tiene capacidad financiera tiene más seguridad para planear su futuro y el de sus hijos sin tener que depender de alguien más”, señala Flores.
—¿Cómo lograr abrir espacios flexibles dentro de las empresas para las mujeres que son madres?
—Se trata —indica la propia Flores— de un tema de competitividad. En este sentido Momlancers junto con Forvia buscan ser agentes de cambio y parte de la solución. Por medio de su iniciativa Back On Track no solo brindan empleo a mujeres que han sido madres, sino que además tratamos de romper paradigmas y abrir espacios inclusivos y flexibles para que ellas puedan florecer en su carrera sin temor a ser juzgadas por sus pausas profesionales.
Hablamos, complementa Cabal, “de un entrenamiento de doce semanas que brinda formación integral y apoyo necesario para relanzar sus carreras laborales.
Para la segunda generación del Back On Track, precisa Flores, “Forvia busca perfiles de mujeres que hayan hecho una pausa con experiencia en compras, manejo de proyectos, ingeniería, contraloría, calidad, cadena de suministro e industria automotriz en Puebla, Querétaro, San Juan del Río, San José Iturbide, Ramos Arizpe, San Luis Potosí y Monterrey”.