RELOCALIZACIÓN: VIENE UNA OLA DE INVERSIÓN EXTRANJERA

El gobierno busca empresas de EU con plantas de producción en China, Singapur y Vietnam.

Norberto Vázquez
Finanzas
MÉXICO, D.F., 13NOVIEMBRE2012.- Fachada del Cinepolis de Plaza Ermita donde el pasado 1 de noviembre un menor de 10 años murió de un disparo de arma de fuego en la cabeza cuando se encontraba viendo una película dentro de una de las salas. El menor murió dos días después en un hospital de la colonia Roma. Las investigaciones empezaron a partir de su muerte cuando el hospital donde fue atendido dio parte a las autoridades.
FOTO: ENRIQUE ORDÓÑEZ /CUARTOSCURO.COM
Enrique Ordoñez/Enrique Ordoñez

La merma que provoca la pandemia de Covid-19 en los mercados mundiales, así como la entrada en vigor del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC) y la guerra comercial entre Washington y Beijing hacen que muchos países replanteen su modelo industrial recurriendo a la relocalización de la producción como medida logística: se trata de trasladar las operaciones de una compañía a otro país donde el mercado presente condiciones más favorables, por lo que el gobierno mexicano se prepara para atraer esa Inversión Extranjera Directa (IED).

El objetivo, dicen los expertos, es obtener mayores ganancias, crear productos a más bajos costos y cerca de los centros de oferta de activos estratégicos como cadenas productivas, buena infraestructura, mercados crecientes y en auge, incentivos fiscales por parte de los gobiernos y, sobre todo, mano de obra barata y de calidad.

Todo ello para asentar una industria a manera de “maximizar los beneficios por la vía de la minimización del gasto”.

En este contexto, empresas de Estados Unidos, Canadá y Europa buscan una nueva residencia estratégica, por lo que la Secretaría de Economía (SE) prepara alicientes de índole burocrática para allanar el camino a decenas de firmas transnacionales que pretendan trasladar su infraestructura a territorio nacional como preámbulo a un nuevo auge del libre mercado en la región.

Escenario

La relocalización de la producción no es un fenómeno que haya comenzado con el estallido de la pandemia. Según los especialistas, la guerra comercial entre Estados Unidos y China, con un incremento de las barreras arancelarias, ya estaba llevando a muchas empresas a retornar a sus países de procedencia o a reubicarse en naciones en vías de desarrollo. Y por la apertura del TMEC México se ha vuelto un gran polo de atracción.

Este mecanismo es un recurso que muchas empresas aprovechan para aumentar su producción sin que ello se refleje en sus costos. Una de las ventajas inmediatas es el incremento del número de trabajadores, ya que con el mismo dinero que en el país de origen o donde estaban ubicadas podían mantener a uno, lo normal es que en la nueva ubicación puedan contratar a dos o más empleados.

Uno de los países con más firmas con ambiciones de reinstalarse es la Unión Americana, por lo que empresas estadunidenses acelerarán su expansión comercial internacional después de la pandemia y entre los destinos principales para invertir está México.

Así lo demuestra la compañía de servicios profesionales TMF Group, que realizó una encuesta entre 300 ejecutivos de compañías multinacionales norteamericanas de diversos sectores, las cuales expresaron su preocupación por el desempeño de las cadenas de suministro internacionales y dijeron que consideran reducir el riesgo en sus operaciones en países como China e Italia, que pararon sus actividades por la pandemia.

“Los líderes empresariales reaccionan rápidamente a los desafíos reevaluando lo que hacen y reconfigurando sus empresas para adaptarse a la interrupción. Dado el nivel de riesgo geográfico, incluso después de que las cadenas de suministro a nivel mundial vuelvan a funcionar plenamente, muchos de quienes realizan operaciones multinacionales buscarán diversificar las cadenas de suministro como parte de sus planes de expansión nacionales e internacionales”, dice la firma en un comunicado.

Aun con la incertidumbre, “un tercio de los encuestados afirmaron que planean acelerar la expansión comercial nacional o internacional buscando oportunidades tras la pandemia; y entre los países que consideran para su expansión se encuentran Canadá, Reino Unido y México, este último como una señal de confianza tras la aprobación del TMEC”.

Se describe que la pandemia “ha impactado las cadenas de suministro a nivel mundial y las compañías multinacionales que sufren este impacto han tenido que optimizar su flexibilidad. Sin embargo, siguen expresando optimismo de que cada mercado puede sincronizar sus recuperaciones operativas de una manera segura y eficiente”.

Canadá, a su vez, ya dio el primer paso con el proyecto de instalación de una empresa de vehículos todoterreno para construir una planta en Ciudad Juárez, Chihuahua.

La inversión prevé una suma de 185 millones de dólares canadienses y se calcula que generará más de mil empleos permanentes en México.

De acuerdo con la Secretaría de Economía se trata del “primer anuncio de inversión en México en la era TMEC”.

La planificación y construcción de la planta están programadas para comenzar en los próximos meses. “Se espera que esté lista para operar en 2021. Esta nueva planta, combinada con las dos instalaciones de fabricación todoterreno de la compañía en Juárez, creará sinergias operativas positivas y eficiencias”, expone a su vez la firma.

IED

Por el momento la Inversión Extranjera Directa (IED) para el primer trimestre de 2020 fue de diez mil 334 millones de dólares, cifra reportada por el Registro Nacional de Inversiones Extranjeras (RNIE) dependiente de la SE.

Según el RNIE las cifras son el resultado neto por empresa o fideicomiso de la diferencia de 15 mil 601 millones de dólares registrados como flujos de entrada y cinco mil 267 millones en flujos de salida.

Si se compara el total de IED captada en lo que va del año con las cifras preliminares reportadas para el mismo periodo de 2019 (diez mil 162 millones de dólares) se observa un incremento de 1.7 por ciento.

“El aumento se concentró en el rubro de cuentas entre compañías, aunque el ajuste posterior de las cifras podría modificar este resultado”, dice el RNIE.

Cabe señalar que la IED registrada provino de mil 803 sociedades con participación de capital extranjero, 556 contratos de fideicomiso y diez personas morales extranjeras.

Así se integró:

Por tipo de inversión (origen del financiamiento) A través de reinversión de utilidades, 76.1%; por nuevas inversiones, 22%; y por cuentas entre compañías, 1.9 por ciento.

Por sector Manufacturas, 44.1%; servicios financieros y de seguros, 24.9%; comercio, 8.3%; generación de energía eléctrica, agua y gas, 5.1%; minería, 4.8% y construcción 4.4%; los sectores restantes captaron 8.4 por ciento.

Por país de origen Estados Unidos, 38.9%; España, 14.3%; Alemania, 9.4%; Canadá, 7.2%; Países Bajos 4.6%; y otros países aportaron 25.6% restante.

Proyecto

Ante este movimiento industrial a nivel global México busca acopiar inversión foránea.

“México ha hablado con diversas empresas extranjeras, en particular del sector siderúrgico, en un esfuerzo por atraer negocios desde Asia para capitalizar el nuevo acuerdo comercial de América del Norte”, dice la secretaria de Economía, Graciela Márquez.

La funcionaria señala que “el gobierno busca activamente empresas de Estados Unidos con plantas de producción en China, Singapur y Vietnam para explorar su relocalización en México; es decir, se buscan empresas europeas y estadunidenses que produzcan desde México para Estados Unidos”, adelanta.

Indica que espera que las primeras inversiones del programa de relocalización lleguen a México a mediados de 2021. “El gobierno habló con diversas empresas (Posco, Ternium, Mitsubishi, Nipón y otras) sobre invertir en México considerando los nuevos requerimientos de acero con el TMEC. Veo posible que siderúrgicas extranjeras se asocien o participen en Altos Hornos de México”, expone.

Señala que el secretario de Comercio estadunidense, Wilbur Ross, entregó al gobierno nombres de empresas interesadas en invertir en México y entre ellas mencionó que el gobierno se dispone a hablar con Apple sobre reubicar su cadena de suministros en México.

Márquez añade que la relocalización de empresas es un asunto que interesa a toda la región de América del Norte. De hecho, durante la reciente visita del presidente Andrés Manuel López Obrador a EU “mucho se habló, tanto con los empresarios mexicanos como con los estadunidenses, de la relocalización, al punto de que respecto de este tema el Ejecutivo, en el viaje de regreso, le encargó a la Secretaría de Economía proponer y encabezar una iniciativa de cómo relocalizar manufacturas”, indica Márquez.

Así, además de los efectos por el Covid-19, la relocalización hacia México podría ser considerada por el mayor nivel de contenido regional que exige el TMEC y por la guerra comercial que mantienen en Estados Unidos y China, beneficiando a México en materia de inversión y empleos.

RECUADRO

Relocalización industrial

Se refiere a los estudios y decisión sobre cuál es el mejor sitio para establecer una industria o fábrica. También se aplica al agrupamiento o concentración de determinadas empresas que se dedican a la fabricación o elaboración de un determinado tipo de productos en una cierta región geográfica. A la hora de decidir la localización industrial entran en juego factores de tipo tanto físico como humanos, entre los que destacan los siguientes.

Proximidad a las materias primas Supone el abaratamiento de los costos de transporte. Este factor es importante sobre todo en las industrias de base que consumen gran cantidad de materia prima de gran volumen, con lo que su transporte suele ser difícil y costoso.

Proximidad a las fuentes de energía Las redes de transporte de energía eléctrica, gasoductos y oleoductos facilitan la localización industrial en otros lugares.

Infraestructura La proximidad a puertos marinos o fluviales facilita el acceso de las materias primas y la distribución hacia los mercados y redes de transporte bien estructuradas: ferrocarril, autopistas y aeropuertos.

Conservación del medio ambiente Muchos países imponen restricciones a la instalación de industrias contaminantes, por lo que las empresas deciden su relocalización en países menos restrictivos.

Mano de obra Este factor explica la reubicación a escala mundial de las industrias que necesitan mucha mano de obra y trasladan sus centros de producción a países que les ofrecen mejores condiciones laborales.

Políticos Los países suelen apoyar de manera directa (mediante empresas públicas) o indirecta (subvenciones, impuestos, facilitando suelo industrial, desarrollando legislaciones laborales flexibles, etcétera) la localización de industrias en determinados lugares.