Deir Al-Balah, Franja de Gaza, 10 de julio. Funcionarios europeos alcanzaron un nuevo acuerdo con Israel para que éste permita la entrada de alimentos y combustible a Gaza, informó la jefa de política exterior de la Unión Europea (UE), horas después de que Israel matara a 15 personas que esperaban recibir atención en una clínica médica, de las cuales diez eran niños.
Las muertes de los niños provocaron indignación de grupos humanitarios.
“La matanza de familias que intentan acceder a ayuda vital es inconcebible”, dijo la directora de la UNICEF, Catherine Russell. “Estas eran madres que buscaban un salvavidas para sus hijos después de meses de hambre y desesperación”.
El ejército israelí alegó que había atacado a un combatiente.
Las imágenes de cámaras de seguridad afuera de la clínica ubicada en la ciudad central de Gaza, Deir al-Balah, mostraban a una docena de personas agachadas frente a la clínica cuando un proyectil explota a pocos metros de distancia, dejando cuerpos esparcidos.
Mientras tanto, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, se preparaba para salir de Washington después de reunirse con el presidente estadunidense Donald Trump, aparentemente sin que se concretara un alto el fuego para el territorio palestino.
Un acuerdo para llevar alimentos y ayuda humanitaria
El acuerdo anunciado por los funcionarios europeos podría resultar en “más cruces abiertos, camiones con ayuda y alimentos entrando a Gaza, reparación de infraestructura vital y protección de los trabajadores humanitarios”, señaló Kaja Kallas, la principal diplomática de la UE.
“Contamos con que Israel implemente cada medida acordada”, afirmó en una publicación en redes sociales.
Los grupos humanitarios dicen que las restricciones militares israelíes y la violencia han dificultado la entrega de asistencia. Los expertos han advertido que los palestinos en la Franja de Gaza está en riesgo de morir de hambre en medio del asedio israelí y la guerra entre Israel y Hamás.
Kallas dijo que el acuerdo reactivaría los corredores de ayuda desde Jordania y Egipto, y reabriría panaderías y cocinas comunitarias en toda Gaza.
Agregó que se tomarían medidas para evitar que se desvíe la ayuda. Israel ha acusado a Hamás de robar ayuda y venderla para financiar actividades. La ONU afirma que no hay evidencia de un desvío generalizado.