Tallin, Estonia, Agosto 1.-Un rascacielos en el centro de Moscú fue atacado por un dron por segunda vez en aproximadamente 48 horas, dañando la fachada del edificio y subrayando aún más la vulnerabilidad de la capital rusa. Las autoridades rusas acusaron a Kiev de organizar el ataque de la madrugada del martes.
Según Rusia, la intensificación de los ataques sobre la región de la capital refleja los fracasos de la contraofensiva ucraniana, mientras que el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, indicó durante el fin de semana que “la guerra está regresando gradualmente a territorio ruso” pero no llegó a atribuirse los incidentes.
Los repetidos ataques con drones subrayan la vulnerabilidad de Moscú mientras la guerra rusa en Ucrania se adentra en su 18vo mes.
Mykhailo Podolyak, asesor de Zelenskyy, tuiteó que Moscú “se está acostumbrando rápidamente a una guerra completa que, a su vez, pronto se trasladará al territorio de los ‘autores de la guerra’ para cobrarse todas sus deudas” pero no confirmó ni negó la implicación de Kiev en el incidente.
Durante la noche, las fuerzas rusas atacaron Járkiv, la segunda mayor ciudad de Ucrania, con drones Shahed de fabricación iraní, dijo el gobernador de la región homónima, Oleh Syniehubov. Uno de ellos impactó contra un edificio de tres alturas de una institución educativa en el distrito de Saltivka y destruyó parcialmente los dos pisos superiores y el tejado. En el momento del incidente no había nadie en el interior del inmueble.
Otros tres drones alcanzaron las instalaciones de un complejo deportivo en el distrito de Shevchenkivskyi de la ciudad, causando daños en el edificio de dos plantas del recinto y lesiones a un guarda de seguridad de 63 años, explicó Syniehubov.
El martes en la mañana, las fuerzas rusas bombardearon la región de Jersón y alcanzaron un centro de salud, indicó el gobernador de la provincia, Roman Mrochko. Un doctor falleció y una enfermera resultó herida, añadió.
En Rusia, el Ministerio de Defensa dijo la madrugada del martes que derribó dos drones ucranianos a las afueras de Moscú y que se hizo con el control de otro que se estrelló contra un rascacielos en el distrito financiero de la capital rusa y causó daños en la fachada del edificio.
El alcalde de Moscú, Sergei Sobyanin, indicó que el choque se produjo en el mismo inmueble que sufrió desperfectos en un ataque similar en la madrugada del domingo. En el IQ-Quarter, ubicado a unos 7,2 kilómetros (4,5 millas) del Kremlin, están las oficinas de varias agencias gubernamentales, incluyendo la sede de los ministerios de Desarrollo Económico; de Desarrollo Digital y Comunicaciones y de Industria y Comercio. Sobyanin apuntó que el incidente del martes no causó heridos.