Ciudad de México, a 18 de mayo. La empresa Avior subsidiaria de Traxion será la encargada de prestar la mayor parte del servicio integral de logística, recepción, almacenamiento, resguardo, distribución y recolección de medicamentos y otros insumos de salud para el IMSS.
El pasado mes de abril, Borsalino González Andrade, director de Administración del Seguro Social adelantaba que el presupuesto sería ejercido con disciplina y transparencia, sin embargo, organizaciones como Mexicanos Unidos contra la Corrupción y Cero Desabasto acusaron la falta de claridad en el fallo de la licitación LA-050GYR988-E18-2022.
Con un fallo emitido el pasado viernes, el departamento de compras del instituto dirigido por Zoé Robledo otorgó a Avior, adquirida recientemente por Traxion de Bernardo Lijtszain, el 80% de los 11 contratos establecidos con una valuación que ronda los 1,400 millones de pesos, para distribuir 282 millones de piezas de medicamentos e insumos para la salud en clínicas y delegaciones del IMSS.
Las organizaciones sociales han destacado que el procedimiento se dio bajo condiciones de opacidad, por un lado, al otorgar a una empresa sin experiencia en el sector médico, como lo es Avior, la mayoría de los contratos en dicha licitación.
Asimismo, mencionaron que desde marzo pasado, con la adquisición de Medistik, Traxion comenzó a gestar la estrategia para convertirse en el máximo distribuidor de fármacos y material médico.
También revelaron que desde finales del año pasado, Avior habría adquirido bodegas especiales para almacenaje y equipo, inversión que no avanzaría de no saberse ganadores del procedimiento.
A finales del 2021, el Órgano Interno de Control dependiente de la Secretaría de la Función Pública, realizó una auditoría al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), concluyendo que la Coordinación de Abastecimiento de Medicamentos y Equipamiento Médico, encabezada por Alejandro Antonio Calderón Alipi, presentó un subejercicio de presupuesto para la compra de insumos.
La auditoría también concluyó en su momento, que en el Insabi no tenía “definidos los procedimientos y programas para los procesos de abasto de medicamentos e insumos”.
Esto resulta relevante, toda vez que la convocatoria emitida por el IMSS, se asemeja en estructura y cláusulas a la que empleó Calderón Alipi durante el ejercicio del 2020, cuya mayor problemática se centró en la falta de ejercicio en el presupuesto destinado para abastecer con medicamentos e insumos médicos a millones de derechohabientes.
Otro punto que han destacado las organizaciones en contra del desabasto de medicamentos, es que los precios para transportar, almacenar y distribuir medicamentos en la propuesta económica presentada por Avior-Traxion es tres veces mayor al de otros concursantes, mismos que podrían variar de acuerdo a las diversas regiones contempladas, derivando en una problemática de abasto de medicamentos en el país y en un posible sobre endeudamiento para el erario público.