México, 14 de octubre. Las comisiones de Hacienda y Crédito Público y de Estudios Legislativos Primera se reunieron con funcionarios del gobierno federal, quienes explicaron a los senadores las 65 modificaciones, 44 adiciones y nueve derogaciones que incluye el proyecto para reformar la Ley Aduanera, cuya finalidad es modernizar el ordenamiento.
El presidente de la Comisión de Hacienda y Crédito Público, Miguel Ángel Yunes Márquez, destacó que este encuentro es una “buena práctica” para exponer a fondo la necesidad de la reforma planteada por el Ejecutivo Federal, cuya minuta fue remitida al Senado de la República el pasado 7 de octubre por parte de la Cámara de Diputados.
“Alcanzar los acuerdos, mantener la pluralidad, buscar la conciliación y los efectos favorables de los proyectos normativos es y será siempre el objetivo de los senadores de la República”, agregó.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Estudios Legislativos Primera, Manuel Huerta Ladrón de Guevara, destacó que los senadores han estado atentos a este encuentro, además de que se han reunido con representantes de asociaciones de agentes aduanales, con lo cual podrán contar con expresiones y opiniones con relación a la reforma.
Consideró relevante que en el proyecto se proponga considerar a los agentes aduanales como una “primera línea” del comercio exterior mexicano, por las importantes funciones que realizan, y celebró que en la reforma se quieran hacer de forma adecuada las modificaciones en esta materia.
Voces
El subsecretario de Ingresos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Carlos Gabriel Lerma Cotera, subrayó que esta reforma dará al sistema de aduanas del país una tecnificación eficiente y transparente, para incrementar la competitividad del comercio exterior, además de proteger a la industria mexicana, al empleo, y contribuir a la seguridad nacional al impedir el tráfico ilícito y el contrabando.
Dijo que el proyecto fortalecerá el Estado de derecho y la transparencia con el combate a la corrupción y la evasión fiscal, y garantizará un régimen contributivo más justo y equitativo que permita financiar más programas sociales, más inversión en infraestructura y los servicios públicos como salud, educación, seguridad para un mayor bienestar de la población.
“No se trata únicamente de realizar ajustes técnicos o de procedimiento, sino de una transformación integral del marco jurídico que regula nuestro sistema aduanero, para responder con eficacia a los retos presentes y futuros del comercio internacional”, sostuvo el funcionario de la SHCP.
En su oportunidad, Erick Jiménez Reyes, administrador general de Auditoría de Comercio Exterior del Sistema de Administración Tributaria (SAT), aseguró que las propuestas sobre la Ley Aduanera no buscan dañar o desprestigiar a quienes participan en las operaciones de comercio exterior, ni persiguen un fin exclusivo relacionado con una determinada mercancía.
Su fin primordial, aclaró, es combatir las prácticas indebidas que se lleven a cabo en las operaciones de comercio exterior y que repercuten en la economía del país, en la seguridad y en la salud pública.
Quienes participan en las operaciones de comercio exterior “no tienen de qué preocuparse; el propósito de la reforma es combatir a quienes afectan con sus acciones, que tiene como consecuencia producir daños a la economía nacional, a los comerciantes y fabricantes que son parte de las cadenas de valor, a la recaudación fiscal, a la seguridad nacional y a la salud pública”, reiteró.
Rafael Marín Mollinedo, titular de la Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM), apuntó que el comercio exterior representa una fuente de ingresos fiscales importante para el país, además de que crea y sostiene a una enorme plantilla laboral con sueldos competitivos, y es considerada “la ventana a través de la cual el mundo se asoma a México”.
Por tanto, enfatizó que la modernización aduanera es fundamental: “necesitamos que se incremente la eficiencia en las operaciones de nuestras aduanas, a efectos de recaudar las contribuciones y aprovechamientos derivados del comercio exterior, todo bajo un esquema de control y seguridad que impida la entrada de mercancías ilegales o peligrosas”.
El subsecretario de Ingresos de la SHCP, Carlos Gabriel Lerma Cotera, detalló que las 65 modificaciones, 44 adiciones y nueve derogaciones propuestas en el proyecto de reforma a la Ley Aduanera, buscan garantizar que la ANAM y el SAT cuenten con las facultades jurídicas y operativas para cumplir cabalmente sus atribuciones.
Asimismo, con las modificaciones, los actores de comercio exterior contarán con reglas claras y con tecnologías modernas, para hacer de las aduanas un motor de desarrollo, que genere una recaudación justa en beneficio de todas y todos los mexicanos.
Precisó que la reforma plantea la creación del Consejo Aduanero, órgano que autorizará el otorgamiento de autorizaciones y concesiones aduaneras previstas en la ley, así como sus prórrogas, suspensiones, cancelaciones y extinciones; el órgano estará integrado por la SHCP, la ANAM, el SAT y por la Secretaría Anticorrupción y Buen Gobierno, cuya finalidad será contribuir a la transparencia y disminuir los riesgos de corrupción.
En el Consejo Aduanero se otorgarán facultades concurrentes a la ANAM en materia de post despacho, ya que actualmente solo participa en el despacho.
Respecto a la tecnologización de las aduanas, Lerma Cotera explicó que se plantea en la reforma que las autoridades aduaneras celebren convenios con la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones (ATDT) en materia de informática y tecnología, para mejorar el análisis de datos.
Agregó que se propone incorporar requisitos y controles para determinar las responsabilidades de los agentes aduanales, que, sostuvo, no son servidores públicos, pero si pueden auxiliar al Estado Mexicano en esas actividades a través de una patente con la que se le otorga el beneficio de realizar tareas de comercio exterior.
Esto, acotó, es fundamental para la competitividad y recaudación de nuestro país, pues tiene la finalidad de contrarrestar prácticas de evasión, subvaluaciones, importaciones temporales que no se retornan al extranjero y el uso indebido de regímenes especiales, entre otros.
Sobre este asunto, recordó que se propuso en la reforma eliminar las patentes vitalicias para agentes aduanales, además de mandatar certificaciones periódicas; originalmente se plantearon patentes por 10 años con certificaciones cada dos años, pero la Cámara de Diputados lo modificó para que las vigencias sean de 20 años con certificaciones periódicas cada tres años.
Otro cambio relevante, continuó Lerma Cotera, es el fortalecimiento a programas de facilitación aduanera de importaciones temporales a la Industria Manufacturera, Maquiladora y de Servicios de Exportación (IMMEX), los recintos fiscalizados, los almacenes generales y lugares distintos a los autorizados, para asegurar que las mercancías importadas bajo esos regímenes se exporten o reexporten
También se incluyen adicionales en materia documental y digital, como el expediente electrónico de pedimentos, donde se hace obligatoria la incorporación de documentos ordinarios de transacción para asegurar la veracidad de los conceptos y elementos que comprenden las operaciones de comercio exterior.
“Esto a efecto de reducir espacios para la falsificación y presentación de declaraciones incompletas o incorrectas, lo que permitirá auditorías más efectivas y facilitará la detección de irregularidades de parte de los operadores de comercio exterior”, precisó.
La reforma, además, amplía el catálogo de infracciones en materia aduanera, aumenta los montos de las multas y establece penalidades más estrictas, congruente con la gravedad de las infracciones cometidas.
“Todo lo anterior con el objetivo de disuadir conductas indebidas de parte de los operadores de comercio exterior, combatir la impunidad que muchas veces ha acompañado a actos ilegales o negligentes en aduanas, aumentar el cumplimiento voluntario y sancionar a quienes no cumplen”, concluyó el funcionario invitado.