El secretario de Estados Unidos en Comercio, Wilbur Ross, afirmó que las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) con México y Canadá durarán cerca de un año.
Tras asegurar que los dos socios comerciales de la Unión Americana habrán de hacer concesiones, descartó una “guerra de disparos”.
El funcionario estadunidense aseguró que la administración Trump mantiene una “mente abierta” sobre si las negociaciones serán bilaterales o trilaterales, pero que su meta es reducir los déficits comerciales de Estados Unidos.
“Los mexicanos saben, los canadienses saben, todos sabemos, los tiempos son diferentes; vamos a tener nuevas relaciones comerciales con la gente y ellos saben que van a tener que hacer concesiones. La única pregunta es cuál es la magnitud y la forma de las concesiones”, enfatizó.
El secretario de Comercio de EU, quien tendrá un papel central en las discusiones, manifestó que su deseo es terminar las negociaciones lo antes posible, pero reconoció que “así no es como funciona el mundo”.
Adelantó que se encuentran en las etapas iniciales del proceso de la Autoridad de Promoción Comercial (TPA) o Vía Rápida y ese proceso toma varios meses, por lo que “Estaríamos hablando de la parte final del año, antes que inicien negociaciones reales”, agregó.
Externó su deseo de que las negociaciones no demoren más de un año: “cuánto va a tomar implementarla y lograr las reducciones, esa es una pregunta distinta, son asuntos muy complicados”, reconoció.
Dijo que tanto el sector privado como el presidente Donald Trump tienen un claro sentido de urgencia, porque a nadie le gusta la incertidumbre. “Vamos a tratar de resolverlo tan rápido como podamos”, remarcó.
Respecto de la forma de la conducción de las negociaciones, el responsable del sector comercio de ese país expuso que el presidente Trump ha indicado su preferencia porque sean bilaterales, pero dijo que tienen “la mente abierta”. “Lo importante es el resultado, no si es bilateral o trilateral”, añadió.
El funcionario estadunidense dijo que una de las metas será anular los déficits comerciales de Estados Unidos.
“Absolutamente. No hay razón por la cual un país, en este caso, Estados Unidos, necesite tener un déficit comercial que, en grandes números, equivale al superávit combinado del resto del mundo”, manifestó.
Cuestionado sobre la posibilidad de que se desate una guerra comercial, Ross respondió que Estados Unidos ya se encuentra en una “guerra comercial”.
“Hemos estado en una guerra comercial por décadas. Es por eso que tenemos un déficit”, apuntó.