Los abogados de Luiz Inacio Lula da Silva, pidieron a los jueces que no encarcelen al expresidente brasileño si su condena es ratificada el miércoles.
Un documento de la defensa presentado el lunes por la noche reveló que da Silva apelará a tribunales superiores si no se anula su condena a nueve años y medio de prisión.
De ser ratificado el veredicto, el exmandatario tal vez no podría presentarse en las elecciones presidenciales de octubre. Por el momento, da Silva encabeza todas las encuestas.
“Ante la remota posibilidad de que se rechacen todos los pedidos (de anulación de la sentencia), pedimos que se garantice al acusado el derecho de apelar a los tribunales superiores en libertad”, dice el documento. “Es necesario que los tribunales superiores discutan el asunto y solo entonces se extraigan las consecuencias de la pena”.
Los fiscales y el presidente del tribunal han dicho que da Silva no debe ser arrestado inmediatamente si los jueces ratifican la condena por corrupción y lavado de dinero.
El juez Sergio Moro sentenció el año pasado que la empresa constructora OAS preparó y renovó un apartamento frente a la playa de Guarujá con la intención de entregarlo a da Silva, supuestamente en pago de contratos con la petrolera estatal Petrobras y otros favores.
Da Silva ha dicho que no es propietario del apartamento, nunca tuvo la llave ni durmió ahí y lo visitó una sola vez.
Lula indicó que se mantendrá al tanto del curso de su apelación desde su hogar en Sao Bernardo do Campo, en las afueras de Sao Paulo.
Asimismo, prevé viajar en las próximas horas a la ciudad sureña de Porto Alegre para agradecer a miles de personas que han acampado cerca del tribunal para apoyar su declaración de inocencia. Otros miles de activistas antiizquierda también están acampados en las cercanías.
En una entrevista en Porto Alegre, la expresidenta Dilma Rousseff dijo que “el miércoles no es el día que determinará si Lula será candidato o no”. Para ella el apoyo a la candidatura de su mentor seguirá aumentando independientemente se la sentencia.
“Esto no es un mero juicio, es parte del proceso que comenzó con mi impugnación ilegal en 2016. Nuestros adversarios pudieron usar el Congreso para expulsarme, pero no lo pudieron usar con Lula porque no estaba en funciones. Por eso usan el poder judicial”, dijo Rousseff. “Lo que no esperaban era ver que cuanta más gente supiera sobre el caso, más crecería la aprobación de Lula mientras caía la tasa de rechazo”.
Rousseff señaló que los adversarios de da Silva quieren impedir su candidatura porque podría derogar las medidas de austeridad impuestas por el presidente Michel Temer, el exvicepresidente que heredó el despacho presidencial tras la impugnación de Rousseff por manipulación del presupuesto fiscal.
Rousseff también sostuvo que una ratificación de la sentencia de Moro tendrá repercusiones internacionales para la justicia brasileña.
“Si se ratifica esta extraña sentencia, será horrible para la justicia brasileña. Si puedes jugar con un favorito en la elección presidencial, ¿qué significa eso para otros contratos comerciales? ¿Cómo se puede decir que los respetarán?”, se preguntó la expresidenta.
A la hora de conocerse la sentencia, el espacio aéreo sobre el tribunal de apelaciones en Porto Alegre será clausurado, lo mismo que las calles cercanas. Se apostarán francotiradores en los tejados ante la posibilidad de disturbios