El tercer debate presidencial republicano presentó confrontaciones entre Donald Trump, Jeb Bush, Marco Rubio, Ted Cruz y John Kasich, en tanto que el formato impidió que el resto de los candidatos pudiera destacar.
Trump acusó a Kasich de ser responsable de la crisis financiera en 2008, en tanto que Bush reclamó a Rubio que no cumpliera su trabajo en el Senado por pasar más tiempo en su campaña.
Por su parte, Ted Cruz acusó a los conductores del debate de hacer preguntas irrelevantes y provocativas y señaló a los medios de comunicación en general de no enfocarse en los temas más importantes.
"¿Qué tal si hablamos de los problemas esenciales que le interesan a la gente?”, reprochó Cruz.
Las intervenciones de Ben Carson, el neurocirujano que aparece como puntero en las encuestas, no destacaron por el formato del debate, así como las de Chris Christie, Carly Fiorina, Mike Huckabee y Rand Paul.