México, 1 de julio. Los padecimientos emocionales que más aquejan a los niños mexicanos tienen relación con los trastornos de ansiedad, déficit de atención e hiperactividad, así como alimenticios y la depresión. “Lo anterior tiene diversas causas: un hogar con poca o nula comunicación afectiva entre padres e hijos, cuando los papás viven un proceso de divorcio con mucha agresión, indiferencia emocional y el clima de violencia que prevalece en una buena parte del país”, dijo Claudia Sotelo Arias, directora del Centro de Especialización de Estudios Psicológicos en la Infancia (CEEPI).
Aunado a lo anterior, la especialista explicó que un alto porcentaje de los niños que padecen estos trastornos están siendo hiperestimulados por su padres y en sus entornos escolares: “son sometidos a arduas tareas escolares y extra escolares. Son niños que nunca paran y no tienen tiempo ni para jugar ni descansar. Estos menores presentan de manera recurrente cuadros de ansiedad, trastornos del sueño, no comen bien o comen demasiado y en algunas casos también padecen depresión. Estos casos se presentan cada vez con mayor frecuencia”, explicó la especialista.
Para contrarrestar los padecimientos emocionales descritos las especialistas de CEEPI hicieron una serie de recomendaciones:
- No sobrecargar a los niños de actividades. Los pequeños necesitan tiempo libre, para estar con sus padres y convivir con ellos.
- No trasmitir mensajes pesimistas y de forma reiterada.
- Evitar que vean TV o peor aún, que jueguen videojuegos o estén en Internet antes de dormir.
- Favorecer la convivencia entre niños de su edad.
- Favorecer el juego como actividad lúdica y no hacerlos competir en todo.
- Supervisar cuánto tiempo pasan en Internet y lo más importante: saber qué hacen y qué ven en la Red.
Para concluir, Sotelo Arias precisó que si los síntomas descritos prevalecen por más de tres semanas, es fundamental acudir a una terapia sicológica infantil para saber la causa del problema y solucionarla.