Una de las cervecerías más renombradas de Bélgica informó este 6 de noviembre que el incremento en la temperatura, ocasionado por el calentamiento global, acortó la temporada de producción un mes en comparación con los años 50.
La cervecería de gueuze Cantillon tiene que enfriar su caldo en tanques abiertos para que los fermentos naturales en el aire ayuden a producir la cerveza agria que es reconocida en el mundo.
Sin embargo, con temperaturas que se quedan en hasta 15 grados Celsius (59 F) durante la noche, Cantillon ha dejado de elaborar la cerveza porque no quiere usar refrigeración artificial.
“Es totalmente anormal. Tenemos esas temperaturas nocturnas en el verano y con esa temperatura es imposible fermentar”, declaró el cervecero Van Roy.
Cantillon es conocida por sus métodos tradicionales y se niega a emplear refrigeración artificial, a la que recurrieron algunos cerveceros tradicionales.
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