El secretario estadunidense de Estado, John Kerry, justificó este lunes el programa masivo de escuchas y espionaje a los aliados europeos asegurando que “no es inusual” que los países “involucrados en asuntos mundiales” lleven a cabo estas actividades.
“Todos los países del mundo implicados en asuntos internacionales y en la seguridad nacional llevan a cabo numerosas actividades para proteger su seguridad nacional, y cualquier tipo de información contribuye a ello”, dijo Kerry después de participar en el foro ministerial de los países de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN).
El semanario alemán Der Spiegel publicó el sábado pasado un reportaje en el que asegura, basándose en informaciones del filtrador Edward Snowden, que Estados Unidos espió masivamente más de 500 millones de llamadas telefónicas en Europa, con especial énfasis en Alemania, Francia e Italia.
Este espionaje, que ha provocado el rechazo de Francia, Italia y Alemania, además del Parlamento Europeo, se extiende a las sedes de la Unión Europea en Nueva York y en Bruselas.
Algunos políticos europeos han amenazado con represalias como cancelar las negociaciones con Estados Unidos para conseguir un Tratado de Libre Comercio (TLC), que Bruselas y Washington querían comenzar a negociar para tener un acuerdo antes de finales de 2014.