El gobierno sirio terminó de entregar la información detallada de su programa de gases venenosos y agentes nerviosos, así como un plan preliminar para destruirlos junto con las instalaciones donde se fabricaban, anunció la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas.
Los documentos confidenciales aportan ‘las bases a fin de elaborar los planes para la destrucción sistemática, total y verificada de las armas químicas e instalaciones de producción declaradas’, informó el grupo de desarme.
Los expertos creen que Siria posee unas 1,000 toneladas métricas de armas químicas, las cuales incluyen gas mostaza y sarín.
El gobierno sirio ya había dado detalles preliminares en septiembre para evitar represalias militares de Estados Unidos a raíz de un ataque con armas químicas ocurrido el 21 de agosto en un suburbio de Damasco, aunque las autoridades del país asiático negaron haber estado implicadas en dicho ataque.