El presidente ruso Vladimir Putin ordenó este 17 de noviembre que el crucero Moskva, actualmente en el Mediterráneo, empiece a cooperar con los militares franceses en las operaciones en Siria contra el grupo extremista Estado Islámico.
Putin habló mientras el ministro de defensa ruso anunciaba que sus aviones de guerra dispararon misiles crucero contra posiciones de milicianos en las provincias sirias de Idlib y Aleppo.
Rusia admitió que una bomba destruyó un avión de pasajeros de una aerolínea rusa el 31 de octubre con la muerte de todos sus 224 ocupantes, un atentado que el Estado Islámico se atribuyó.
La coalición de occidente que combate al EI, liderada por Estados Unidos, acusa a Rusia de atacar a grupos rebeldes opuestos al presidente sirio Bashar al-Assad, pero no afilados con el grupo radical.
Mientras se intensifica la campaña rusa, el canciller Serguei Lavrov criticó al gobierno estadunidense por seguir lo que calificó como una política contradictoria y confusa en Siria.