El gobierno de Barack Obama hizo este miércoles pública información sobre 2 controversiales programas de monitoreo electrónico.

El Congreso estadounidense comenzará este 2 de agosto su receso veraniego sin haber definido el futuro de los inmigrantes sin papeles, que enfrentan a diario el riesgo de ser deportados.

Desde los estertores de la Segunda Guerra Mundial, de forma gradual y firme, se fueron asentando las nuevas prioridades en el manejo de la presencia de Estados Unidos en el mundo: por fin, y en definitiva, había sido derrotada la visión aislacionista que trataba de evitar cualquier acción más allá del continente americano.

Wikileaks describió el fallo del tribunal militar como “peligroso extremismo de seguridad nacional por parte del gobierno Obama”.

Barack Obama presentará a los republicanos su propuesta de reducir impuestos a empresas, mientras creen más empleos.

Un grupo de congresistas demócratas pidió este lunes al presidente estadounidense Barack Obama que permita el regreso a Estados Unidos de 9 activistas inmigrantes detenidos en Arizona.

Un grupo de personas que protesta contra las políticas de deportación de inmigrantes en Estados Unidos y pedir la liberación de 9 ‘dreamers’ detenidos.

Alrededor de 17 congresistas están prestos a interceder ante el presidente Barack Obama por los 9 dreamers que fueron detenidos en Nogales, Arizona.

Una coalición de organizaciones pro inmigrantes denominada “Un millón de voces por un camino a la ciudadanía” fue lanzada este miércoles en Los Ángeles, California, en demanda de una reforma migratoria.

Docenas de personas se concentraron este miércoles frente a la Casa Blanca para solicitar al presidente Barack Obama que suspenda inmediatamente las deportaciones de inmigrantes sin papeles.

Durante meses los republicanos en el Senado han utilizado la obstrucción legislativa para bloquear a los nominados por el presidente Barack Obama a posiciones en ciertas agencias.

Una investigación interna al nominado para secretario del Departamento de Seguridad Nacional podría traer dolores de cabeza a Hillary Clinton y Terry McAuliffe.