“Benito Juárez cayó al quinto lugar en percepción de seguridad”.

“Un campo relativamente nuevo dentro de la astronomía”.

Una película que inspira a través de la ciencia la reutilización de materiales

Depresión, ansiedad, trastorno por estrés postraumático, anorexia y bulimia merman la calidad de vida de adolescentes y jóvenes

Los tumores pequeños se pueden extirpar mediante un procedimiento conservador

En el acto de entrega-recepción expuso 10 puntos de la política ecológica y ambiental humanista que regirán al sector

Solicitan atender retos urgentes como seguridad, certeza jurídica y atención a desastres naturales

Acompañó a la presidenta al Zócalo de la CDMX donde recibió el bastón de mando de pueblos indígenas y afromexicanos

“Gobernaré para todas y todos”.

Este 1 de octubre Claudia Sheinbaum asumió el cargo de presidenta de México. Es justo que por primera vez en nuestra historia nos gobierne una mujer. El cargo lo ha ganado con solidez: obtuvo 59.75% de los votos, más que 53.19% de López Obrador en 2018. Habría que remontarnos a los tiempos del viejo PRI para encontrar porcentajes superiores: Miguel de la Madrid con 70.96% en 1982 y José López Portillo con 100% en 1976.

Una elección sin precedente que arroja una ganadora indiscutible. No hay duda, en términos de éxito electoral, de que Claudia Sheinbaum llega a tomar el timón de un país que le concedió una enorme confianza a través de una vasta mayoría. Sin embargo, ante los múltiples pendientes que existen en nuestro México, no queda más que trabajar incansablemente para poder marcar el rumbo en un estilo de mando propio y así mantener la ventaja que tiene quien goza de una legitimidad incuestionable.

“No hay derecho a fallar”, escribió en X, al tiempo que felicitaba a la presidenta Claudia Sheinbaum