Pasada la toma de posesión de los nuevos gobernadores de Tamaulipas y Aguascalientes la atención social y de la clase política comienza a centrarse en las elecciones del próximo año. Las gubernaturas del Estado de México y Coahuila estarán en juego, de manera central, aunque otros cargos de elección popular formarán parte de la disputa político-electoral.
Y en ese horizonte resulta evidente, tanto por su peso político como por el padrón de electores con que cuenta, la importancia del Edomex, que a partir del resultado que arroje la elección a gobernador marcará sin duda una tendencia de preferencia social que no puede minimizarse.
Durante décadas el gobierno del Edomex se consideró la joya de la corona, por lo que tanto para Morena como para el PRI la obtención de un resultado favorable se traduce en el primer caso en una evidente señal de consolidación y en el segundo en un signo abierto de sobrevivencia.
Sin embargo, a estas alturas del proceso Delfina Gómez es la única que tiene asegurado su lugar en la boleta electoral, toda vez que ningún otro partido ha determinado quién será su candidata o candidato.
Un estudio de Massive Caller relativo a la preferencia electoral en septiembre pasado en el Edomex plasma un empate técnico entre Morena, con 38% de la preferencia, y la coalición PRI-PAN-PRD con 35.9%. Les siguen el PVEM con 7.1% y MC con 6.1 por ciento.
A partir de que Delfina Gómez aparece como la virtual candidata de Morena y Juan Zepeda Hernández por parte de MC, el ejercicio destaca quiénes podrían ser sus eventuales adversarios.
Por la coalición PRI-PAN-PRD el primer lugar lo ocupa el panista Enrique Vargas del Villar con 33.4%, seguido de la panista Alejandra del Moral con 17.8%; mientras que en el PVEM aparecen José Alberto Couttolenc Buentello con 43.1% y José Luis Durán Reveles con 15.6 por ciento.
En el plano personal, el ejercicio presenta dos variantes. En la primera Gómez aparece a la cabeza con 37.8%, seguida por Del Villar con 34%, Couttolenc con 7.9% y Zepeda con 6.8 por ciento.
En la segunda, Gómez mantiene la primera posición con 44.6%, seguida de la priista Del Moral (en lugar de Del Villar) con 24.7%, Couttolenc con 8% y Zepeda con 7.4 por ciento.
Al comparar los resultados de ambos escenarios se infiere que en el caso de que PRI, PAN y PRD opten por postular a un candidato común, el precandidato panista contaría con mayores posibilidades de triunfo que la eventual aspirante de extracción priista.
Coahuila
A nivel de partidos, el escenario es aún más cerrado en Coahuila, aunque Morena aparece en segunda posición con 38.3%, en tanto que la eventual coalición PRI-PAN-PRD ocupa la primera con 39.8%; es decir, hay una diferencia de apenas 1.5%, mientras que MC solo alcanza 2.8% de la intención del voto.
En las preferencias para la candidatura de una eventual coalición PAN-PRI-PRD, el priista Manolo Jiménez Salinas lidera con 54.1%, seguido del panista Guillermo Anaya con 14.9%; y en Morena Luis Fernando Salazar Fernández se ubica en primera posición con 30%, seguido de Ricardo Mejía Berdeja con 25.6 por ciento.
Por parte de MC se perfilan Alfonso Danao de la Peña con 32.5% y Evaristo Lenin con 19 por ciento.
Del estudio se desprenden al menos dos lecturas importantes. La primera, que el resultado de la contienda se antoja reñido, aunque podría reconfigurarse durante el transcurso de la campaña formal; y, segunda, que MC podría estar en riesgo de perder su registro en el plano estatal.